Para las 10:00 horas de este jueves está fijada la llegada al país en calidad de detenido del ingeniero comercial Rafael Garay Pita (40), quien fue extraditado desde Rumania para que responda por 37 presuntos delitos de estafa estimados en $1.800 millones.
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Garay viajó desde Bucarest, la capital rumana, en un vuelo comercial bajo la custodia de un equipo de la PDI encabezado por la comisaria Gilda Ahumada e integrado por los subcomisarios Eugenio Ríos y Sebastián Oyarzún. Después de una escala en París de 7 horas siguió rumbo a Chile.
Tras su llegada al aeropuerto internacional de la capital, el ex panelista de televisión y experto en artes marciales será trasladado a la Corte de Apelaciones de Santiago, donde se le notificará en la Secretaría Criminal del proceso de extradición. Se espera que llegue al tribunal alrededor de las 12:30 horas.
Posteriormente, Garay será llevado al Tercer Juzgado de Garantía de Santiago, en el Centro de Justicia, donde se le controlará la detención y se le formalizará por la estafa reiterada. El ingeniero comercial ya fue formalizado en ausencia el 24 de noviembre pasado, ocasión en que el fiscal José Morales solicitó la prisión preventiva e inició el proceso de extradición.
En esa oportunidad, la jueza Paola Robinovich concedió la prisión preventiva por considerarlo un peligro para la sociedad. En la audiencia de hoy, el fiscal Morales y los querellantes volverán a pedir esta medida por riesgo de fuga.
El defensor público Claudio Aspe, quien representó a Garay el año pasado, apeló a la medida, pero tanto la Corte de Apelaciones de Santiago como la Corte Suprema rechazaron sus recursos en diciembre pasado. Ese mismo mes, la Corte de Apelaciones de Brasov, donde fue descubierto el ingeniero comercial, decretó la prisión preventiva de Garay como parte del proceso de extradición. Esta fue concedida en febrero pasado por ese tribunal rumano.
En la formalización en ausencia, el fiscal Morales afirmó que Garay Pita ofrecía asesoría financiera y de inversiones que materializaba mediante la suscripción de un contrato entre el cliente y la empresa “Think & Co”, cuyo representante legal y socio principal es el ingeniero comercial.
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Por medio de este contrato, Garay se comprometía a una rentabilidad mínima anual de 18% en pesos, libre de impuestos y antes de comisión. Como resultado de esta gestión, “Think & Co” supuestamente cobraría como honorarios un 7% sobre la utilidad acumulada en el período.
Para captar el dinero de las víctimas, Garay les señalaba que a través de “Think & Co” efectuaba diversas inversiones en el mercado asiático, en el mercado internacional de divisas y en acciones de sociedades anónimas extranjeras, preferentemente del área tecnológica o empresas no contaminantes.
Sin embargo, según el fiscal, Garay nunca tuvo real intención de asesorar financieramente a los clientes aportantes, sino solamente apropiarse de los fondos, escondiendo detrás de la fachada de la sociedad de papel la ilicitud de su conducta.
Garay abandonó el país en septiembre del año pasado. Tras una denuncia por presunta desgracia, la PDI determinó que el ex panelista de la televisión se encontraba en Rumania, lugar en que fue detenido portando documentación falsa.
En principio, Garay informó por medio de Facebook que viajaba a Francia para tratarse por un cáncer cerebral que resultó ser falso. Fue descubierto en Brasov donde habitaba un departamento en compañía de su novia rumana.
Al ver que el proceso de extradición era inevitable, Garay contrató al abogado Rainiero García de La Pastora, quien esta semana logró borrar de sus antecedentes una condena por conducción en estado de ebriedad, hecho que protagonizó la madrugada del 18 de diciembre de 2007, mientras se dirigía en su vehículo a Sala Murano en Lo Barnechea.
En esa oportunidad protagonizó un accidente que dejó a una joven con graves lesiones. Fue sentenciado a 200 días de pena remitida y registró una alcoholemia de 2,37 gramos.
Tras borrarle los antecedentes, el abogado García de la Pastora dijo que “técnicamente” Garay tiene irreprochable conducta anterior, lo que lo favorecerá en la formalización y eventual juicio.
