Los trabajadores que se encuentran en huelga en la Minera Escondida rechazaron hoy la invitación de la compañía a reunirse este lunes, al argumentar que la propuesta de la empresa para acabar con el conflicto mantiene los «graves perjuicios» que los llevaron a iniciar la medida de fuerza.
La directiva del Sindicato Nº1, que agrupa a 2.500 mineros, indicó que salvo el aumento de los bonos por término de conflicto, por única vez, que aumentan de 8 millones a 11,5 millones de pesos (unos 17 mil dólares) y un par de puntos modificados «esta nueva oferta mantiene los graves perjuicios que nos obligaron a hacer efectiva la huelga».
Desde el sindicato adelantaron que se mantendrán en huelga «hasta las últimas consecuencias» y que son capaces de llegar hasta 60 ó 90 días sin faenas.
El pasado viernes, Minera Escondida aceptó reunirse este lunes con los dirigentes de los 2.500 trabajadores en huelga, con el fin de resolver el conflicto que ha dejado millones de dólares en pérdidas.
En su respuesta, la empresa informó al Sindicato que presentó en la Dirección del Trabajo una oferta de cierre que contempla remuneraciones fijas, bonos variables y beneficios, así como el bono de término de negociación, equivalente a 11,5 millones de pesos, la reajustabilidad y el plazo del contrato colectivo.
El sindicato demanda un aumento salarial de 7 % y un bono de 25 millones de pesos chilenos (unos 38.460 dólares) por trabajador, entre otros beneficios.
El Gobierno aseguró este sábado que debido a la huelga que desde hace 39 días afecta a la Minera Escondida, la mayor productora de cobre del mundo, se han dejado de producir cerca de 110.000 toneladas del metal rojo.
Escondida produce el 20 % del cobre nacional y 6 % del cobre a nivel mundial, y debido a la huelga se dejan de vender unos 700 millones de dólares.
La australiana BHP Billiton tiene una participación de 57,5 % en la propiedad de La Escondida, entre cuyos accionistas minoritarios están la estadounidense Río Tinto y la japonesa Jeco Corporation.
