La Comisión Europea (CE) reprochó este martes a Brasil haber conocido el fraude de la carne adulterada «por la prensa» y tildó de «inaceptable» que no hubiera una notificación oficial del caso por parte de las autoridades brasileñas, al tiempo que pidió nuevas aclaraciones sobre el caso.
PUBLICIDAD
«Nos parece inaceptable que nos enteráramos de esto por la prensa y que no nos lo comentaran oficialmente», declaró el director general de Cadena Alimentaria de la Dirección General de Salud, Michael Scannell, durante un debate sobre acuerdos comerciales en la comisión de Agricultura del Parlamento Europeo.
Scannell mostró su «preocupación al ver tanta corrupción» en los servicios de control de Brasil y consideró que «estas actividades debían haber sido detectadas mucho antes».
El caso, que afecta a 21 establecimientos de producción de carne y por el que han sido suspendidos 33 funcionarios del Ministerio de Agricultura del país y una veintena de directivos de empresas, ha puesto bajo sospecha los sistemas de control de seguridad alimentaria de Brasil, país con el que la Unión Europea negocia actualmente el acuerdo comercial del Mercosur.
Al conocer el caso, la CE inició contactos con el país y pidió «aclaraciones» de manera inmediata, además de la suspensión de la exportación de productos de las empresas implicadas, aunque no ha hablado en ningún caso de bloquear la entrada a los productos cárnicos del país, una decisión que sí ha tomado Chile de manera «temporal».
Brasil ya confirmó ayer a Bruselas que suspendería esos intercambios, que en el caso de la UE afectan a cuatro empresas con licencia para exportar a territorio comunitario, aunque la CE ha pedido «nuevas aclaraciones».
«Hemos visto una respuesta rápida a nuestras preocupaciones, pero estas garantías no nos parecieron suficientemente satisfactorias y de nuevo pedimos a Brasil más aclaraciones», explicó Scannell a los eurodiputados.
PUBLICIDAD
La CE ha pedido también a los Estados miembros intensificar los controles, incluidos controles de higiene, «para tener más garantías de todas las exportaciones brasileñas en general», dijo el director general.
«Si hay un problema sistémico en Brasil hay que reforzar los controles y tomar las medidas pertinentes», subrayó el representante del Ejecutivo comunitario.
El comisario de Salud y Seguridad Alimentaria, Vytenis Andriukaitis, viajará a Brasil el próximo lunes para reunirse con su ministro de Agricultura, informaron a Efe fuentes comunitarias.
En nombre del Partido Popular Europeo, el francés Michel Dantin pidió a la CE «seguridad» y afirmó que esta situación «va a desestabilizar a los consumidores».
Por su parte, la socialista española Clara Aguilera pidió «más transparencia» y «máximas garantías a la Comisión en los controles sanitarios de las importaciones de carne bovina y avícola de Brasil».
Otros parlamentarios solicitaron que el caso se tenga en cuenta en las negociaciones del acuerdo comercial con Mercosur.
«Es indispensable que la CE nos garantice que se respetan las mismas reglas y los mismos niveles a los países que quieren exportar a Europa», afirmó el vicepresidente de la comisión parlamentaria, Paolo de Castro.
Desde los Verdes, José Bové afirmó que el caso revela «un fallo en el sistema global de alerta de fraude», que cuestiona no solo a las empresas implicadas sino «también a Brasil», lo que tiene que llevar, en su opinión, a reorientar la negociación comercial con el socio.
El representante de la CE respondió que el próximo paso es averiguar si se trata de un problema «sistémico», y que, de serlo, «habrá consecuencias».
El pasado viernes, la policía brasileña detectó que varias empresas habían «maquillado» con productos químicos carnes en mal estado que no cumplían con los requisitos para ser exportadas.
El fraude abarcaba desde cambiar la fecha de vencimiento del embalaje de carne ya caducada hasta inyectar agua en la carne de pollo para alterar el peso o utilizar ácido ascórbico para enmascarar el deterioro de los productos.
La Policía Federal informó de que están implicados agentes públicos y directivos de empresas que los sobornaban para que avalaran la manipulación.