Igual que el conocido Doctor Simi, los corpóreos -o personas disfrazadas con gigantes trajes de espuma- son importantes para acercar las instituciones con los niños, pero también con sus usuarios.
PUBLICIDAD
Los corpóreos de los organismos del Estado son un tanto desconocidos, aunque algunos gozan de mayor fama que otros.
Ese es la caso de Forestín, la mascota de la Corporación Nacional Forestal (Conaf). Este corpóreo fue creado por la ingeniero forestal de la U. de Chile y profesional de la Conaf, Gabriela Omegna, en el año 1976.
Sin embargo no recibió el nombre con el que se le conoce actualmente hasta 1983, el que nació tras un concurso infantil.
El más conocido es el Pato del BancoEstado, que ha protagonizado varias campañas publicitarias y ha ganado bastante notoriedad.
Los otros corpóreos son Jack Esparragou (Agencia Chilena para la Inocuidad y Calidad Alimentaria del Ministerio de Agricultura), Rigoteo (Comisión Nacional del Riego), Detectibot (Policía de Investigaciones de Chile), Capacito (Servicio Nacional de Capacitación y Empleo), Contralorito y Contralorita (Contraloría General de la República), Gastón (Ministerio de Energía), Luciano Brócoli (Agencia Chilena para la Inocuidad y Calidad Alimentaria del Ministerio de Agricultura), Leñito (Consejo de Certificación de la Leña) y SAGüeso (Servicio Agrícola y Ganadero).