El Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) informó este sábado que decidió modificar la restricción de importación a las carnes brasileñas, manteniendo precautoriamente la medida para los productos carne bovina, porcina y de ave sólo a los 21 establecimientos que se han visto involucrados en la red de corrupción al interior de diversas plantas frigoríficas de ese país.
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En todo caso, la restricción se hará extensiva a cualquier otro establecimiento que se vea envuelto en estos hechos en el transcurso de la investigación que lleva la autoridad brasileña.
Esta modificación se tomó debido a los antecedentes oficiales recibidos en respuesta a la carta enviada por el SAG al Ministerio de Agricultura, Pecuaria y Abastecimiento de Brasil, ratificado por la delegación que el servicio envió a ese país para inquirir más detalles del caso de las carnes adulteradas.
A modo de prevención, el SAG y el Ministerio de Salud continúan reforzando las medidas de vigilancia y fiscalización, tanto en frontera para el ingreso de productos pecuarios, como en los puntos de comercialización, con el objeto de garantizar la sanidad e inocuidad de los alimentos que se consumen en el país.
