Un comité del Senado de EEUU quiere interrogar al yerno del presidente Donald Trump, Jared Kushner, por las entrevistas que mantuvo en diciembre pasado con representantes del Gobierno ruso, según informó The New York Times.
PUBLICIDAD
El diario, que cita fuentes del Gobierno y del Congreso, informa que Kushner mantuvo una primera reunión con el embajador ruso en Washington, Sergey I. Kislyak, y con el titular de un banco estatal de desarrollo, Sergey N. Gorkov.
El Comité de Inteligencia del Senado estaría investigando esos contactos como parte de las pesquisas de las autoridades sobre las interferencias rusas en las elecciones del 8 de noviembre pasado.
La primera reunión de Kushner, que ya se conocía, se produjo en la Torre Trump, durante la transición presidencial, e incluyó al yerno de Trump, el embajador ruso y el general retirado Michael Flynn, entonces asesor de seguridad de Trump.
Después de ese primer contacto, Kushner se reunió con Gorkov, titular del banco ruso Vnesheconombank e incluido en una lista de personas sancionadas por EEUU por la anexión rusa de Crimea y su apoyo a los grupos armados prorrusos de Ucrania.
Con la llegada a la Casa Blanca de Trump, el 20 de enero pasado, Flynn fue designado asesor de seguridad nacional, pero renunció al puesto el 13 de febrero en medio de un escándalo por ocultar sus contactos con representantes del Kremlin.
La Casa Blanca solo había reconocido hasta ahora la reunión entre el embajador ruso y Kushner, pero la portavoz presidencial, Hope Hicks, confirmó ambos contactos y restó importancia a lo tratado por el yerno del entonces presidente electo.
PUBLICIDAD
Según Hicks, Kushner se ha mostrado dispuesto a hablar con el Comité de Inteligencia del Senado y recordó que durante la transición presidencial se reunió con decenas de representantes extranjeros.
«No está tratando de ocultar nada y quiere ser transparente», agregó la portavoz, que también desempeñó ese papel durante la campaña electoral que llevó a Trump a la Presidencia.
De acuerdo con el periódico, Kushner será la persona más próxima a Trump que es interrogado por comités del Congreso o por el FBI como parte de las investigaciones oficiales sobre la intervención rusa en las elecciones de noviembre.