A media mañana se posicionaron mensajes en favor y en contra de la acción del TSJ de atribuirse las competencias de la Asamblea Nacional en Twitter, un mecanismo muy popular de comunicación entre los venezolanos. En la calle, en el trabajo, en el Metro de Caracas hubo de todo. Desde manifestaciones de pesar e incertidumbre, hasta el apoyo irrestricto al gobierno de Maduro.
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Como en otras oportunidades y cuando estalla una crisis, todo el mundo a casa. A mediados de la tarde, el sistema de transporte público casi colapsa. En el centro de la capital venezolana, dos movilizaciones se cruzaron, lo cual empeoró el tráfico.
La marcha convocada por la juventud del Partido Socialista Unido de Venezuela, apoyando a Maduro, y al TSJ, y otra de un grupo de Diputados de oposición, que acudió a la sede del alto tribunal. Varios parlamentarios, como Juan Requesens, fueron golpeados por funcionarios de la Guardia Nacional, quienes impidieron su acceso al TSJ, “Volveremos, pero con el pueblo que votó por nosotros”, dijo a la prensa el joven parlamentario, con parte de su camisa deshilachada en las manos.
La gente a la expectativa
Juan Marcano, oficinista, dijo estar “harto de tanto problema, ni uno ni otro me darán la comida que necesita mi familia. Bastante trabajo que paso todas las semanas haciendo cola para medio comprar algo y ahora me vienen con que no hay Congreso (Asamblea). Si Maduro se dedicara a mandar y no a hablar tanta peste de la oposición, a lo mejor estaríamos en otra situación”, enfatizó a Metro World News.
A Olga Sánchez le preocupa que haya una guerra civil en Venezuela. “Estoy muy en desacuerdo que Maduro haya eliminado a los diputados, yo voté y quiero seguir haciéndolo, pero con esto que pasó, se está eliminando de un solo plumazo el derecho al sufragio”, afirmó.
Esta jubilada señala que le angustia que haya revueltas como las de 2014, “en donde un gentío cayó preso y el Gobierno siguió como si nada. Tengo a hijos y nietos en otros estados del país y creo que si arrecia la pelea política, la economía empeorará”.
Carlos Rosales dice ser chavista, pero no madurista. Dice que jamás votaría por la oposición, “pero no apoyo eso de sacar a los diputados de su trabajo. Inclusive los del Partido del Gobierno. Ellos están ahí por algo, porque nosotros los pusimos ahí y les pagamos, y no por los señores del TSJ”.
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Diputados alerta
Para el diputado Juan Manuel Matheus por el estado Carabobo (centro) la decisión de la Sala Constitucional que suprime las funciones de la Asamblea Nacional es “ilegal e írrita y se pone de espaldas al pueblo de Venezuela”.
Dijo a Metro World News que los Magistrados del TSJ, “son los verdugos de la democracia y proceden a interpretar leyes de la república a su conveniencia, a fuerza de recursos de interpretación, se cierra el círculo de acecho a los diputados electos por el pueblo”.
Desde el año pasado se han producido 51 decisiones del TSJ invalidado leyes y actos parlamentarios. “El Gobierno lo que quiere es usar a su brazo jurídico para zafarse de la actividad contralora de la Asamblea (…) se quiere endeudar y formar empresas mixtas con países amigos, entre otras cosas”, expuso el diputado.
Acusó a Nicolás Maduro, de manejar el TSJ a su antojo y lo equiparó con Alberto Fujimori, “quien cerró al Congreso de Perú en los años 90’ . Maduro ha venido afectando el funcionamiento de la Asamblea Nacional venezolana, pero en este caso ha cruzado la apariencia democrática para decir formalmente que el TSJ intentará sustituir nuestra función legisladora”.
¿Cómo analiza esta actuación del TSJ desde el punto de vista jurídico?
La Constitución de Venezuela es muy clara: la AN es el órgano legislativo y es electa por el pueblo. No hay más interpretación posible. Lo que está haciendo la Sala Constitucional del TSJ y sus siete verdugos (en referencia a los magistrados) es una usurpación de funciones que tiene responsabilidad penal. La función legislativa es exclusiva de los parlamentarios y así lo seguiremos ejerciendo. Iremos a nuestras sesiones ordinarias y seguiremos redactando leyes.
Finalmente dijo que la sentencia adversa a la mayoría parlamentaria, “lo que hace es catalizar el ímpetu de lucha de los diputados y del pueblo. Hoy más qué nunca hay razones para que se aplique la Carta Interamericana Democrática al régimen de Maduro y hoy más que nuca el pueblo debe estar en la calle exigiendo elecciones”.