El domingo el Partido Socialista decidió apoyar a Alejandro Guillier como candidato presidencial, lo que dio como resultado que este lunes Ricardo Lagos bajara su candidatura. No es primera vez que se baja una candidatura presidencial previo a las elecciones (sean primarias o convencionales). En los últimos 10 años se han realizado dos elecciones presidenciales (2009 y 2013), en las cuales también existeron casos de este tipo.
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Elecciones de 2009
Considerando candidaturas ya inscritas (y no las que se bajaron previa inscripción), el 2009 se bajó la candidatura del senador Alejandro Navarro. El entonces senador por la región del Biobío oficializó su candidatura el 12 de noviembre del 2008 en nombre de su partido en formación, el MAS. Originalmente el candidato pretendía competir junto a otros aspirantes de «Juntos Podemos Más» para realizar una suerte de primaria. Sin embargo, el MAS finalmente no participó de ese proceso. De hecho, dicha coalición mantuvo abierta la invitación para que desde el MAS apoyaran la candidatura de Jorge Arrate, quien finalmente fue candidato.
El MAS el 2009 no era oficialmente un partido, pero esta en proceso de «junta de firmas». Por esta condición, Navarro se inscribió como independiente y se le solicitó desde el Servicio Electoral (Servel) la reunión de 11.000 firmas. Superando con creces la meta, Navarro presentó un total de 20.000 e inscribió su candidatura. A pesar de todo el esfuerzo, Navarro depuso su candidatura el 22 de septiembre por motivos económicos, a días de la oficialización de candidatos por parte del Servel.
Estos motivos económicos habrían sido impulsados por decisión del MAS, partido que prefirió asumir los costos en las elecciones de las cámaras (alta y baja), antes que una presidencial, que según las encuestas, no tenía mucho futuro. Finalmente el MAS apoyó a Marco Enríquez-Ominami.
Los múltiples candidatos de la alianza
Para las elecciones del 2013, fue desde la derecha donde se produjo este fenómeno. Inicialmente en las primarias de la «Alianza por Chile» participarían Andrés Allamand (RN) y Laurence Golborne por la UDI. Sin embargo, desde ese partido se generaron varios cambios.
Primero, luego de varios errores, la candidatura de Laurence Golborne fue declinada, y la UDI apostó en su reemplazo por Pablo Longueira. Longueira fue quien representó a la UDI en la primaria, y la ganó .
Sin embargo, a la renuncia de Golborne, le seguiría también la renuncia de Pablo, aparentemente por una depresión que le impedía mantener el ritmo necesario para una candidatura presidencial.
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En aquél momento, la UDI ya había vencido a Andrés Allamand en la primaria, y levantaron a Evelyn Matthei como reemplazante de Longueira, y por ende, candidata de la Alianza. La decisión generó algo de malestar en el sector. En tan sólo una elección, para definir al candidato representante de la alianza por Chile, hubieron dos bajadas de candidaturas y un perdedor de primarias.
Escenario actual
Para las presidenciales de este año, y previo a la renuncia de Ricardo Lagos, ya se habían bajado candidaturas del sector. Es el caso de José Miguel Insulza, Fernando Atria e Isabel Allende, los tres del partido socialista. Los dirigentes bajaron sus candidaturas por distintas razones, una de ellas apuntaba a que finalmente se decidieran los candidatos a través de una consulta ciudadana. Dicha medida no ocurrió y se eligió el candidato que sería apoyado por el PS mediante una votación el domingo pasado.
En la papeleta, las opciones eran Alejandro Guillier levantado por el Partido Radical y el ex mandatario Ricardo Lagos, sin contar con un candidato propio del Partido Socialista. Finalmente el elegido fue Alejandro Guillier, lo que desencadenó que el lunes en la mañana, Lagos bajara su candidatura.
