El carguero espacial chino «Tianzhou-1», lanzado el pasado jueves desde la base de Wenchang, en el sureste de China, logró hoy acoplarse sin contratiempos al laboratorio orbital «Tiangong-2», un experimento vital
para los planes de China de tener una estación permanente en el cosmos la próxima década. Según informó este sábado el Centro de Control Aeroespacial de Pekín a través de la agencia oficial Xinhua, el acoplamiento se produjo a las 12:23 hora
local (4:23 GMT), y es el primero de los tres que hay programados para ensayar este tipo de tecnología para las misiones futuras. EFE