Un alza registró el desempleo en el Gran Santiago, llegando al 7,7%, informó este martes el Centro de Microdatos de la Universidad de Chile.
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El dato es 1,2% mayor al 6,5% registrado en el último estudio de diciembre, aunque es menor respecto del mismo mes de 2016 cuando llegó a 9,4%. De esta manera se registraron 244.900 personas sin empleo.
De acuerdo al economista Jaime Ruiz-Tagle, director del Centro de Microdatos de casa de estudios, “desde una perspectiva histórica, la tasa de desempleo se ubica en un nivel medio, esto es, bajo los niveles anteriores a 2012, pero sobre los niveles de los últimos cinco años” a excepción de marzo de 2016.
Sin embargo, el dato que viene siendo la constante es el fuerte componente de los trabajadores por cuenta propia que en este sondeo crece un 19% en los últimos doce meses.
A ello, otro indicador que prende la alerta es el de los empleadores, que para este tipo de estadísticas son aquellos también independientes o emprendedores como los cuenta propia, pero que son más formales y que contratan a otras personas. En este informe ellos retroceden un 8,9% en un año (tendencia a la baja similar a la que muestra la última encuesta de desocupación del INE) . Asimismo, registraron una caída en sus ingresos del 14,7% respecto de marzo de 2016.
Mala calidad de empleo
“El empleador, que es el emprendimiento de buena calidad, el que obtiene altos ingresos y que tiene posibilidades de hacer cotizaciones y por lo tanto tener protección social, es el que cae fuertemente”, explica Juan Bravo, economista de Clapes UC.
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En ese sentido, el especialista recalca que “tenemos una composición del empleo de mala calidad, donde el emprendimiento de mala calidad que es el cuenta propia es el que lidera esta creación de empleo”.
Bravo sostiene que esto, y en general la situación del desempleo, se explica por la débil situación económica por la que sigue atravesando el país. Justamente para este tipo de trabajadores, que son independientes, pero que tiene gente que depende de ellos, “el crecimiento económico es vital. O sea, cuando comienza a caer el crecimiento, el emprendimiento de buena calidad también se ve afectado (…) Claro, si hay menos gente emprendiendo, también contrata menos, en cambio los cuenta propia tienden a aumentar”, subraya.
Bravo subraya que los trabajadores por cuenta propia seguirán siendo un “amortiguador” para que la tasa de desempleo no sea más alta, pero advierte que sucederá otra situación que podría desequilibrar la balanza para que el indicador se consolide sobre el 7%.
“Hay mucha gente que está perdiendo su empleo, pero no todos pueden salir a hacer trabajo por cuenta propia (…) el trabajo por cuenta propia va a seguir existiendo, el problema es que, sobre todo la gente que tenía un empleo de buena calidad con mejores ingresos, no le sirve este tipo de empleo, o sea, claro que es mejor que esta cesante, pero para ellos es más difícil salir a vender cosas a la calle o cantar en el Metro”, concluye el economista.
