El precandidato presidencial de Chile Vamos, Sebastián Piñera, entregó detalles este jueves sobre su fideicomiso ciego, asegurando que tanto él como su esposa se retiraron de las sociedades de sus hijos, donde participaban de manera minoritaria.
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De cara a las elecciones presidenciales, Piñera enfatizó que irá «más allá» de lo exigido por la ley, que obliga a declarar la administración de su patrimonio, y que «me he impuesto voluntariamente criterios adicionales».
«Tanto yo como mi mujer, Cecilia, nos hemos retirado por completo de la propiedad de las sociedades conformadas con nuestros hijos en las que participábamos de manera minoritaria», dijo el precandidato por La Moneda y precisó que esto “se materializó el mes de abril y la porción pagada del mismo se encuentra invertida en depósitos a plazo».
Respecto de sus activos personales y los de las sociedades en los que mantendrá solo participación en su propiedad, el abanderado de Chile Vamos aseguró que “constituiré mandatos de administración especial de cartera en los términos exigidos por la Ley 20.880, respecto de todos los activos contemplados en el Artículo 26 que esa norma establece y que incluyen las acciones de sociedades anónimas abiertas constituidas en Chile».
En cuanto a los que no se encuentran comprendidos en la obligación legal, “también constituirán mandatos especiales o fideicomisos ciegos voluntarios respecto de todas las acciones de sociedades anónimas constituidas en el extranjero», acotó.
En la sede de su comando, en la comuna de Las Condes, Piñera señaló que respecto a la exprimera dama, Cecilia Morel, quien no está obligada a declarar sus intereses, «ha decidido adscribir voluntariamente todos los compromisos e iniciativas que yo asumo”.
Es por esto, que Morel “también ha realizado su Declaración de Intereses y Patrimonio y también constituirá fideicomisos ciegos, en los mismos términos comprometidos por mi persona», indicó el ex Presidente.
Finalmente, informó que sus hijos «han decidido de manera absolutamente voluntaria que las sociedades de su propiedad, en las que ni mi mujer ni yo participamos, constituirán fideicomisos ciegos voluntarios respecto de todas sus inversiones en acciones de sociedades anónimas abiertas que se transen en las bolsas chilenas».