El líder opositor venezolano Henrique Capriles aseguró este viernes que al menos 85 oficiales de la Fuerza Armada fueron detenidos por disentir con la «represión» de ese cuerpo contra las protestas opositoras que dejan 36 muertos en poco más de un mes.
PUBLICIDAD
Capriles afirmó que varios de los uniformados, entre ellos jóvenes sargentos y capitanes, se encuentran presos en la dirección de contrainteligencia militar en Caracas, y que en su mayoría pertenecen al Ejército. Ninguna autoridad militar o del gobierno reaccionó aún a esa afirmación.
«Han sido detenidos solo por el hecho de haber expresado descontento y haber dado una señal, una declaración, algún comentario de estar en desacuerdo con lo que es la actuación de la Guardia Nacional y la Policía Nacional, la salvaje represión» señaló el dirigente a través de la red social Periscope.
Capriles añadió que los propios oficiales le hicieron llegar la información a través de sus familias, y negó que estuvieran planeando alguna acción para deponer al presidente Nicolás Maduro.
«En la Fuerza Armada hay un profundo descontento», afirmó el ex candidato presidencial, quien manifestó que a un «grupo importante» de militares -en desacuerdo con la cúpula- se le ha negado la solicitud de retiro.
El ministro de Defensa y comandante de la institución castrense, Vladimir Padrino López, ha reiterado su lealtad incondicional a Maduro en medio de las protestas iniciadas el 1 de abril, y apoyó la convocatoria del mandatario a una Asamblea Nacional Constituyente.
PUBLICIDAD
Capriles denunció igualmente que el gobierno se plantea excarcelar delincuentes para que repriman las manifestaciones en reclamo de comicios generales para anticipar la salida de Maduro, elegido hasta 2019 y a quien la oposición culpa de la grave crisis política y económica.
Según el dirigente, ya «hicieron una prueba» en la ciudad de Maracaibo (oeste). «Pretenden usar a privados de libertad, uniformarlos y usarlos al frente de la represión», sostuvo.
Capriles, quien no presentó evidencias del supuesto plan, responsabilizó a los ministros de Interior y Justicia, Néstor Reverol, y de Asuntos Penitenciarios, Iris Varela, quienes tampoco se han pronunciado sobre tal señalamiento.
Según el político, Reverol ha informado al gobierno sobre un «agotamiento» de los grupos antimotines encargados de controlar las protestas.