El Ministerio de Obras Públicas (MOP) cifró en al menos $3.000 millones los montos que se deberán invertir en la región de Atacama para reparar los daños que dejaron las intensas lluvias.
PUBLICIDAD
El subsecretario de la cartera, Sergio Galilea, quien ayer recorrió la “zona de catástrofe” tras aluviones y el desborde de cauces, señaló a La Tercera que “la reposición de la conectividad, limpieza y tratamiento de los flujos de los cauces implicará un trabajo de entre seis a ocho semanas como máximo”.
Recomendados:
Jesuitas expulsan a Felipe Berríos tras investigación por denuncias de abuso sexual: “Tiene prohibido el ejercicio público del sacerdocio”
Choque de trenes deja decenas de heridos en Buenos Aires, Argentina: uno de ellos descarriló en Palermo
Fatal marcha de conscriptos a Putre: así fue el recorrido que hizo la ministra en visita al lugar donde murió el soldado Franco Vargas
Asimismo, Galilea aseguró que algunos trabajos en las zonas de Chañaral y Copiapó pueden resolverse en unas dos o tres semanas aproximadamente.
“Pero vamos a tener que seguir trabajando, sobre todo en limpieza de cauces, porque son trabajos lentos e importantes. Pero la conectividad y la limpieza, que son las dos tareas más urgentes, debieran estar resueltas a partir de 20 días”, acotó.
En Chañaral, en tanto, considerada la comuna más afectada, el subsecretario Galilea proyectó que con cinco cargadores frontales pequeños, no grandes máquinas, en 15 días podría estar limpia la zona más afectada.
La autoridad del MOP también detalló que, pese a que se recuperó gran parte de la conectividad, hay cerca de 40 puntos que presentan dificultades en sus vías debido a que se registraron socavones o daños.
“En todos ellos se puede transitar con precaución o tomar un camino alternativo. Hay conectividad”, aseguró el subsecretario Galilea.
De acuerdo al último reporte de la Onemi, se registran más de 1.000 personas damnificadas en las regiones de Atacama y Coquimbo; 617 aisladas y unas 1.200 se encuentran albergadas.
Es por esto que el Gobierno decretó “zona de catástrofe” para la provincia de Chañaral, y las comunas de Copiapó, Tierra Amarilla y Alto del Carmen, en la región de Atacama.