Para llegar desde Iquique a Mocha son alrededor de dos horas y media en auto, unos 142 kilómetros, pasando por Huara, la comuna a la que pertenece este pueblo, distante a 70 kilómetros de su municipio.
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El día amanece algo nublado, pero con una temperatura agradable en la capital de la Región de Tarapacá y se mantiene así al avanzar por una carretera que parece interminable en medio del desierto.
Los últimos veinte minutos de la travesía son bajando por los cerros a través de un camino sinuoso de una pista con las pronunciadas laderas a un costado. Desde esa vista comienza a asomarse el verde que resalta entre las montañas rocosas. Es el pueblo de Mocha que nos da la bienvenida.
La gente se prepara para celebrar en la pequeña plaza del pueblo, frente a la Iglesia de San Antonio, patrono de la localidad. El templo es una construcción del siglo XVII y cuya última restauración terminó en 2013.
La razón de la fiesta es que, pese a estar situados en un lugar tan lejano, ahora estarán más cerca del resto del mundo gracias al arribo de la telefonía celular. La alegría de la gente es que por fin podrán comunicarse con sus seres queridos.
En la actualidad viven sólo 15 personas, adultos mayores en su mayoría. Muchos habitantes dejaron el pueblo precisamente debido a su aislamiento.
“Un pueblo que ha tratado de mantenerse en el tiempo gracias a nuestros adultos mayores día a día haciendo patria acá, la verdad es que yo me saco el sombrero. Proyectos como estos les harán la vida más fácil para así tener comunicación directa”, destacó José Bartolo, alcalde de Huara en el acto.
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Una de estas personas es Margarita Sáez, quien, sin embargo, no es originaria de allí. Conoció a su marido, que es de Mocha, en Santiago y ya lleva 34 años en el pueblo. Ella muestra la alegría por la instalación de la antena que llega gracias al programa de cobertura de zonas aisladas que ha impulsado la Subsecretaría de Comunicaciones (Subtel) y que, en este caso, pertenece a la compañía Claro.
Margarita señala que, por fin, podrá comunicarse con su familia que está repartida entre Iquique, Valparaíso y la capital. Asimismo, cuenta a Publimetro un hecho que ejemplifica cuánto necesitaban estar conectados.
“En 2005 aquí hubo un terrible terremoto, mi casa se cayó toda, quedamos bajo los escombros y no había cómo comunicarse con la familia. Había una empresa trabajando acá y permitió que nos comunicáramos tres personas para avisar lo que había pasado”, detalla.
Añade que hasta ahora sólo podían hablar por una radio VHF que operaba una sola persona y que no siempre estaba disponible, ya que podía estar en su chacra trabajando. “Ahora con esto estamos felices”, relata.
En tanto, el alcalde comenta que esto ayudará a darle una potencia turística al lugar. También recalcó que “se vienen más proyectos” en línea con otras temáticas que afectan al poblado. Una de ellas es que en Mocha sólo cuentan con dos horas de luz al día y apenas un par de casas tienen paneles solares.
Cuando la alianza público-privada da frutos
La instalación de la antena fue celebrada por todos los habitantes y originarios del pueblo. De hecho, el acto partió con una “Pawa”, una ceremonia aymara donde se le agradece a la Pachamama, utilizando hojas de coca y licores, como vino, que se esparcen a los cuatro puntos cardinales.
La llegada de la antena es parte del programa de contraprestación, modelo que surgió luego que en 2014 el Gobierno adjudicara la banda 700 MHz, proceso que ganaron Claro, Entel y Movistar.
“Durante esta administración de la Presidenta (Bachelet) se tomó la banda 700 para la telefonía móvil de los datos, la que se licitó en tres bloques para la tecnología 4G. Entonces, como modelo, el Estado les entrega este bien de uso público, como muy pocos que quedan en Chile, pero con la condición que vayan a localidades que no son rentables”, explica el subsecretario de Telecomunicaciones, Rodrigo Ramírez.
Este plan implica la instalación de esta tecnología en 1.228 localidades rurales desde Arica a Tierra del Fuego. Además, contempla la obligación para las compañías que por dos años deberán suministrar acceso a Iirnet gratuito a 503 establecimientos educacionales municipales y/o subvencionados.
Ramírez indica que las obras ya están recepcionadas prácticamente en todos los lugares donde se llevaron a cabo “y hoy en día estamos en proceso de inauguración y 1.200 localidades ya están con los servicios”.
La celebración termina y antes de partir, se nos acerca un caballero y nos señala las ruinas de lo que fueron casas hasta el sismo 7.8 de magnitud que afectó a la región hace más de diez años. Hoy el pueblo luce construcciones nuevas que destacan por sus colores y donde ondean las banderas chilenas y la multicolor representativa de los pueblos indígenas, todo entre los cerros color ocre.
Al marcharnos del pueblo, Margarita no deja de expresar su satsfacción. “Es lo que más necesita uno, comunicarse, que sepan que estamos bien (…) Muchos dicen que si hubiera más comunicación, estarían más tiempo acá”.