Unas tres semanas, por lo bajo, demorará la reparación del tradicional Reloj de Flores de Viña del Mar, que esta jornada fue destruido por la caída de un pino de 25 metros de altura.
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El tradicional atracción viñamarina poseía un seguro, por lo que la empresa mexicana de Zacatlán (Estado de Puebla) Relojes Olvera III Generación -encargada de su funcionamiento desde hace cuatro años- comenzará prontamente a trabajar en la reposición de sus piezas.
La alcaldesa de Viña del Mar, Virginia Reginato, que durante esta mañana se emocionó hasta las lágrimas al ver las condiciones en que quedó el Reloj de Flores de su ciudad -que fue inaugurado con motivo del Mundial de Fútbol de 1962-, dijo que «es conocido en todo el mundo. El Reloj de Flores es una tradición, por algo fue el reloj más lindo del mundo».
El representante de la empresa Siglo Verde (encargada de la mantención del reloj), Carlos Jara, dijo en torno al tiempo de rehabilitación del aparato que será “al menos las manecillas si es un tema que tenemos que reemplazar, porque esas son de aluminio y no se pueden reparar. Creo que por lo menos un mes o al menos tres semanasagilizando los tiempos al máximo”.
También confirmó que varios componentes que hay que reemplazar del reloj serán traídos especialmente desde México.
