El papa Francisco regaló este miércoles al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, un emblemático texto sobre la paz y un medallón dedicado al mismo tema, durante su encuentro privado en el Vaticano.
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El documento, que lleva el título «La no violencia, estilo de una política para la paz», escrito por el papa argentino con ocasión de la Jornada Mundial de la Paz 2017, fue entregado personalmente por el pontífice al mandatario estadounidense.
«Espero que sea un instrumento de paz», le dijo en español el papa a Trump, durante el tradicional intercambio de regalos al término de una audiencia de media hora en el estudio privado del pontífice en el palacio apostólico.
«Necesitamos paz», le contestó en inglés Trump, quien le regaló una serie de libros, todos ellos de Martin Luther King, el pastor estadounidense de la Iglesia bautista que desarrolló una labor crucial en Estados Unidos al frente del movimiento por los derechos civiles para los afroestadounidenses.
«Creo que le va a gustar. Lo espero», le dijo Trump.
El primer encuentro entre los dos líderes generó muchas expectativas por sus posiciones muy diferentes sobre temas como migración, cambio climático, venta de armas, pena de muerte, islam.
El papa, que al inicio del encuentro parecía serio, apareció luego cordial y sonriente y llegó hasta bromear con la esposa de Trump, Melania, sobre el gran tamaño de su marido, alto más de 1,90 metros.
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«Pero, ¿qué le das de comer?», le comentó divertido.
Las relaciones entre Francisco y Trump se habían enturbiado después de que en febrero de 2016, a bordo del avión de regreso a Roma desde México, el papa criticara las declaraciones contra los emigrantes del entonces precandidato presidencial republicano.
«Una persona que piensa sólo en hacer muros, sea donde sea, y no hacer puentes, no es cristiano. Esto no está en el Evangelio», dijo entonces Francisco con respecto a la promesa electoral de Trump de construir en la frontera con México un muro de más 2.500 kilómetros.
A esas declaraciones el candidato republicano replicó con dureza, acusándolo de ser un político más que una autoridad moral.