La búsqueda de presuntos cómplices de los autores de los atentados cometidos el 7 de junio en Teherán continúa en Irán, donde fueron detenidos o abatidos varias decenas de yihadistas miembros o «vinculados» al grupo Estado Islámico (EI), según los medios.
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El domingo, cuatro miembros del grupo yihadista EI murieron «durante enfrentamientos con las fuerzas de seguridad» en el sur de Irán, según la agencia de prensa Isna.
«Dos son extranjeros», dijo el general Azizollah Maleki, jefe de las fuerzas de seguridad de la provincia de Hormuzgan (sur), citado por Isna, sin precisar su nacionalidad. Se incautaron armas y una bandera del grupo EI.
El ministro de Inteligencia, Seyyed Mahmud Alavi, había anunciado anteriormente que el presunto «cerebro y comandante» de los atentados había sido abatido después de haber «huido del país».
Sin embargo, no precisó la identidad del hombre, el lugar exacto ni las circunstancias de su muerte, ni tampoco qué les había llevado a establecer que se trataba del «cerebro» de los atentados.
El ministerio de Inteligencia anunció el viernes el arresto de 41 personas en Teherán y en las provincias de Kermanshah, del Kurdistán y de Azerbaiyán Oeste, todas ellas situadas cerca de las fronteras iraquí y turca.
Desde entonces, numerosos sospechosos más han sido detenidos en varias provincias.
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Según el ministro de Inteligencia, alrededor de «25 grupos terroristas fueron desmantelados» desde que empezó el año iraní, el 21 de marzo.
«Estamos sorprendidos pues en los años anteriores desmantelábamos dos grupos al mes, pero desde comienzos de este año, [desmantelamos] uno al día prácticamente», agregó Alavi.
Diecisiete personas murieron y decenas resultaron heridas en el ataque perpetrado por hombres armados y kamikazes el pasado miércoles contra el Parlamento y el mausoleo del imán Jomeini en Teherán, los primeros atentados reivindicados por el EI en Irán. Los cinco asaltantes fueron abatidos.
