El alcalde de Curanilahue, Luis Gengnagel, localidad afectada por el desborde del estero Plegarias, confirmó que las labores de limpieza del sector tardarían una semana y para ello se dispuso de personal de las Fuerzas Armadas para agilizar el proceso.
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A raíz de la emergencia, unas 710 casas resultaron afectadas, dejando a más de 2 mil 800 personas damnificadas, siendo una de las comunas más afectadas en el país y en la cual se decretó una alerta roja debido a los más de 200 milímetros de lluvia que cayeron en la zona.
Al respecto, el alcalde añadió que “en este instante estamos en proceso de limpieza de viviendas. Los vecinos están lavando y necesitan carbón y cloro. Estamos comprando todo lo que encontremos acá en la zona, y la Onemi también nos está entregando material. Hay viviendas que perdieron todo, como en la población Javiera Carrera, donde el agua entró de un momento a otro en las casas”.
Finalmente, la autoridad reconoció que tras las primeras horas del temporal, el panorama es “desolador, es desastroso. Tuvimos una emergencia parecida el 2006, pero esto fue pero aún porque esa vez se nos inundó de la mitad hacia abajo de Curanilahue, pero hoy fue de principio a fin. Es triste ver a personas que lo perdieron todo”.
