Heidi McKinney, una joven de Oregón, EEUU, de 27 años ha sido condenada a ocho meses de arresto domiciliario y tres años de libertad condicional por acosar sexualmente a su compañera de asiento, de 19 años, en pleno vuelo.
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McKinney, que viajaba con su cuñada, insistió en tomar varias fotos de la mujer de 19 años a pesar de sus protestas. Después de que el avión despegó, McKinney trató de atraer a la joven de 19 años a tomar alcohol que había introducido clandestinamente en el avión.
McKinney sometió a la joven de 19 años a bromas lascivas y degradantes y al contacto físico, incluyendo lamerse la oreja de 19 años, colocando su mano en la entrepierna de la víctima varias veces e intentando obligar a la chica de 19 años a tocar los pechos de McKinney, según consignó en una nota de condena el abogado federal adjunto Ravi Sinha, según informó el medio local The Oregonian.
Luego de eso, «McKinney se subió encima de la víctima y dijo que quería tener relaciones sexuales», se explica en el memorando de Sinha.
Cuando la mujer de 19 años la empujó, McKinney la maldijo y la llamó «pobre». La víctima alertó a un miembro de la tripulación de vuelo que la alejó de la atacante, según el fiscal.
McKinney fue acusada inicialmente de conducta sexual abusiva. Como parte de un acuerdo de culpabilidad, se declaró culpable en marzo pasado de «asalto con la intención de cometer un delito grave», ya que la intención de la victimaria, según el fiscal, era «humillar y acosar a la víctima».
