La oferta de crédito a hogares se mantiene restrictiva en el segundo trimestre del año, según la Encuesta sobre Créditos Bancarios del segundo trimestre del 2017 del Banco Central.
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El sondeo realizado a los ejecutivos de créditos del sector bancario dan cuenta que para la cartera hipotecaria, un 25% de los bancos reporta condiciones de financiamiento más limitadas que en el trimestre anterior, mientras que en segmento de consumo un 36% de los bancos indica condiciones más restrictivas.
A nivel sectorial, las condiciones de crédito permanecen restrictivas. Un 46% y 39% de entidades informa condiciones más limitadas de financiamiento a sectores inmobiliario y de la construcción, respectivamente.
Respecto de la demanda por préstamos, a pesar de algún repunte del segmento hipotecario, el informe del ente emisor señala que persiste la debilidad de la demanda de crédito por parte de los hogares.
Para la cartera de consumo, se mantiene la proporción de bancos que percibe una demanda más débil (21%) y aparecen instituciones que reportan un significativo debilitamiento (7%).
En tanto, para el financiamiento de viviendas, aumenta tanto el número de bancos que percibe un fortalecimiento como un debilitamiento de la demanda en el trimestre, a 33 y 25%, respectivamente.
Se limita oferta de crédito para pymes
Por su parte, para grandes empresas, un 87% de las instituciones encuestadas no reporta cambios en sus estándares de aprobación en el trimestre, mientras que en segmento de las pymes, un 23% sí indica condiciones más limitadas.
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En cuanto a la demanda, de parte de las grandes empresas un 40% de los bancos encuestados considera que se debilitó en el segundo trimestre del año, mientras que el 33% percibe un fortalecimiento.
En el segmento pymes, se debilitó la percepción de la solicitud respecto de los tres primeros meses del año. El porcentaje de entidades financieras que percibe un fortalecimiento se encuentra en un 15%, en tanto, la proporción que considera que la demanda se debilitó alcanza a 31%.
Asimismo, por sectores, continúa la percepción de una débil demanda por parte de empresas inmobiliarias y constructoras. Para el primer segmento, el número de bancos que considera que la demanda se debilitó en el período representa un 73% y, para las constructoras, un 39%.
