Quince países de la Unión Europea (UE), Suiza y Hong Kong están afectados por la crisis de los huevos contaminados, anunció el viernes la Comisión Europea.
PUBLICIDAD
En la UE, los países concernidos son Bélgica, Holanda, Alemania, Francia, Suecia, Reino Unido, Austria, Irlanda, Italia, Luxemburgo, Polonia, Rumanía, Eslovaquia, Eslovenia y Dinamarca, precisó un portavoz del Ejecutivo europeo en una rueda de prensa.
Hay granjas «bloqueadas» en cuatro países en los que «se confirmó la presencia de la utilización ilegal de este producto»: Bélgica y Holanda, donde se originó la crisis, y Alemania y Francia, según esta fuente.
Los otros integrantes de la lista «recibieron exportaciones procedentes de estos cuatro países», agregó.
La Comisión anunció asimismo este viernes que reunirá a los países afectados para «sacar las lecciones» de la crisis, al parecer el 26 de septiembre.
En el centro de esta crisis está el uso de fipronil -un antiparasitario estrictamente prohibido por la UE en criaderos de gallinas- por empresas especializadas en la desinfección de explotaciones agrícolas.
Las investigaciones llevadas a cabo en Bélgica y en Holanda se aceleraron el jueves, lo que condujo a la detención de dos dirigentes de una empresa que presuntamente utilizó este producto en gallineros en un tratamiento contra el piojo rojo.
PUBLICIDAD
El escándalo estalló la semana pasada que llevó a retirar millones de huevos de las góndolas de supermercados alemanes y holandeses.
El fipronil se utiliza habitualmente como antipulgas y antigarrapatas para perros y otros animales domésticos, pero está prohibido en la cadena alimentaria. A altas dosis puede provocar problemas neurológicos y vómitos.
Los huevos contaminados presentan a priori un riesgo débil para la salud del consumidor.