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Casi un año después del terremoto que asoló en agosto Amatrice y otras localidades del centro de Italia, el país volvió a revivir el miedo y la angustia con un nuevo sismo, esta vez en la isla de Ischia (sur), donde dos personas murieron y 41 resultaron heridas.
Los vecinos se encuentran hoy fuera de sus casas, pasean por las calles o charlan en sillas de jardín o en las entradas de sus portales.
Pero su desesperación ha vivido una tregua esta mañana, cuando los equipos de emergencia han rescatado a un niño de 11 años que había permanecido 14 horas atrapado bajo dos bloques de hormigón.
Los equipos de rescate italianos extrajeron este martes tras 16 horas al último de tres niños que habían sido atrapados en el derrumbe de su casa tras el sismo de magnitud 4,0 que dejó el lunes dos muertos en la turística isla italiana de Ischia.
Un conmovedor y largo aplauso recibieron los bomberos que trabajaron sin descanso para rescatar a Ciro, el último de los tres hermanos que estaba sepultado por el derrumbe en Casamicciola, en el noroeste de la isla, frente a Nápoles.
Los equipos de rescate habían extraído durante la noche al padre y sucesivamente a los otros dos hijos, entre ellos un bebé de 7 meses, hasta culminar con el tercer rescate tras 16 horas.
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Ciro, de 11 años, en calzoncillos y cubierto por el polvo, fue colocado en una camilla y traslado en ambulancia a un hospital para una serie de controles, aunque al parecer se encuentra en buenas condiciones.
«Ciro está sano y salvo. Los bomberos no cesaron de trabajar para socorrer a los tres niños», anunciaron en un tuit los bomberos.
El padre de los niños contó a la prensa que se encontraba en la cocina cuando se derrumbó el piso superior.
Los niños se encontraban en su propia habitación, mientras la esposa, encinta de cinco meses, se encontraba en el baño y pudo salir por una ventana dando la alarma.
Según medios locales, los niños se salvaron porque se refugiaron bajo una cama.
«No sé cómo llamarlo si es un milagro o no, que todos estaban muertos y volvemos a nacer», dijo Erasma De Simone, la abuela de los tres niños rescatados de entre los escombros para el diario Il Corriere della Sera. Y añadió: «Ciro fue valiente, está preocupado por los hermanos, Mattias me preguntó dónde estaba su hucha».
La isla de Ischia es una de las más bellas de Italia y, aunque habitualmente cuenta con unos 70.000 habitantes, en periodos estivales se convierte en meta turística y llega incluso a acoger a 300.000 personas.