El martes fueron encarcelados dos de los cuatro detenidos la semana pasada por los atentados en Cataluña. Driss Oukabir, es uno de los apresados con cuyo nombre se arrendó una furgoneta usada por los terroristas en el atentado de Barcelona, el 17 de agosto.
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La llegada del marroquí a la cárcel de Soto del Real (Madrid) no fue del todo tranquila. «Te vamos a rajar cuando salgas al patio» y «puto terrorista de mierda», le gritaron los presos desde las ventanas a Oukabir, según explican fuentes policiales y de Instituciones Penitenciarias al diario El País.
El acusado estaría recluido en una unidad de aislamiento, no obstante, habría pedido protección tras las amenazas recibidas, de acuerdo a información entregada por mismo medio.
A Oukabir el juez de la Audiencia Nacional española, Fernando Andreuse, le imputa el crimen de integración en organización terrorista además del delito de asesinatos y lesiones de carácter terrorista.
El Marroquí de 28 años fue detenido el día del primer atentado en Ripoll, una localidad de 10.000 habitantes en el norte de Cataluña en la que crecieron la mayoría de los sospechosos.
El detenido fue quien alquiló la camioneta que sirvió para perpetrar el atentado de La Rambla, aunque alega que era para una mudanza. Es hermano de Moussa, uno de los muertos en el atentado de Cambrils, turística localidad costera unos 120 km al sur de Barcelona.