La comida rápida ha ido cambiando en Chile. En los últimos años, alternativas saludables como ensaladas para llevar o el popular sushi han ido posicionándose en el menú rápido de los chilenos.
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Así lo demostró el estudio “Evaluación de la Contribución de Productos de Comida Rápida en el Estado Nutricional de Estudiantes de Educación Superior de Santiago”, realizado por las Escuelas de Administración de Servicios y de Nutrición y Dietética de la Universidad de los Andes.
El informe consideró una muestra estadística de 500 jóvenes estudiantes de 48 comunas, principalmente del Gran Santiago y algunas regiones. Llama la atención uno de sus datos principales: el 60,5% de los estudiantes de educación superior tienen un estado nutricional normal. ¿Y qué pasa con el consumo de completos y sándwich que solemos ver en los barrios universitarios?
Los factores positivos
El estudio señala que además de hamburguesas con papas fritas y completos, el sushi toma su lugar como uno de los tres alimentos preferidos por los jóvenes universitarios. El platillo japonés esta compuesto principalmente por verduras y arroz, lo que sin duda es una opción más saludable que las grasas saturadas y carbohidratos de una porción de papas fritas.
Otro factor positivo destacado en el estudio fue que el 51,7% realiza actividad física, al menos dos veces a la semana. Esto, sería complemento para que los jóvenes logren mantener un estilo de vida saludable. Sin embargo, otros factores negativos como el consumo de alcohol y el exceso de grasa corporal, ensombrecen estas buenas noticias.
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El lado oscuro de la comida rápida
De acuerdo al estudio, en promedio la comida rápida aporta la mayor cantidad de calorías consumidas por los jóvenes, con 298,6 kcal/día. En segundo lugar se encuentran los productos procesados azucarados (213,3 kcal/día en promedio). Las bebidas azucaradas y alcohólicas aportan sobre las 140 kcal/día, y los snacks salados alcanzan los 26 kcal/día.
Sobre los momentos en que los jóvenes buscan la comida rápida, el 82% de los evaluados manifestó que ingiere este tipo de alimentos principalmente cuando salen con amigos. Respecto de las principales motivaciones que tendrían para su consumo destacan el poder compartir con sus pares (75%), el sabor (63%) y la facilidad de acceder a estos productos (60%).
Una radiografía a la nutrición juvenil
En datos directamente relacionados con su estado nutricional, poco más de un cuarto de los consultados (25,9%) tiene sobrepeso, un 10,5% es obeso, un 2% tiene bajo peso y el 60,5% está dentro de los índices de IMC (Índice de Masa Corporal) normales.
Pese a aquello, un 39,5% de los jóvenes presentó exceso de grasa corporal. Sin embargo, para establecer estas cifras el consumo de alcohol también fue considerado. En este caso, el 58,7% de los encuestados consume al menos 140 calorías diarias de alcohol, lo que a pesar de representar cerca del 7% de las calorías recomendadas diarias, es sólo una lata de cerveza.