Voceros del Kremlin aseguraron que en enero de 2016 desecharon una petición del vicepresidente ejecutivo de las empresas de Donald Trump, Michael Cohen, en la cual se solicitaba apoyo para la construcción de una torre en Moscú.
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El vocero del presidente ruso Vladimir Putin, Dmitry Peskov, dijo a la prensa que el correo electrónico de Cohen fue recibido en la dirección colectiva de la oficina de prensa. Peskov dijo que fue uno de muchos de e-mails que la oficina de prensa recibe todos los días y aseguró que el Kremlin nunca respondió.
«No respondemos a asuntos de negocios. No es nuestro trabajo», aseguró Peskov de manera seca y cortante a los periodistas, que investigan conexiones entre el magnate – presidente y la oficina del ex oficial de la KBG.
Cohen y la división inmobiliaria de Empresas Trump deseaba construir un rascacielos en la capital rusa, para lo cual se habían asociado con una contraparte local: la I.C. Expert Investment.
Pese a que el hoy inquilino de la Oficina Oval, ha negado en reiteradas oportunidades que no tiene intereses económicos en Rusia, la confirmación de estas tratativas le colocan en una situación difícil.
El abogado también confirmó haber contactado a mediados de enero de 2016 al portavoz del presidente ruso Vladimir Putin, Dmitri Peskov.
«Sater me sugirió que escribiese un mensaje a Dmitri Peskov, portavoz del presidente ruso, porque la propuesta habría necesitado autorizaciones del gobierno ruso y éstas no habían sido otorgadas», declaró Cohen. Según ABC, entregó documentos y correos electrónicos a investigadores del Congreso.
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Pero las autorizaciones nunca fueron concedidas y el proyecto fue abandonado menos de dos semanas después, señaló Cohen, quien dice no recordar haber recibido respuesta a su mensaje.
Felix Sater, un inmigrante ruso que creció en Brooklyn y que estuvo en prisión por herir a un hombre en una pelea en un bar, trabajó en varios proyectos inmobiliarios de la Organización Trump. Él y Cohen son descritos como amigos de la infancia.
En mensajes reportados por The New York Times, Sater alardeaba de sus lazos con Putin y predecía que el proyecto de la Torre Trump en Moscú podría ser políticamente beneficioso.
«Nuestro hombre puede convertirse en presidente de Estados Unidos y nosotros lo podemos orquestar», escribió Sater. «Voy a poner a todo el equipo de Putin detrás de esto, yo manejaré el proceso», afirmó.