Los pies de los bebés son como los índices de la bolsa o los compañeros desordenados de la oficina: casi nunca están quietos. Y por eso fue que Gabriela Riquelme (31) perdió un zapatito especial de su guagua en el Metro de Santiago. «No sé de dónde venía ni hacia dónde iba, pero típico que las guaguas acercándose al año de vida no pueden tener los pies sin moverse y de tanto revolotear, se cayó un zapato» dice a Publimetro. Todo habría ocurrido en noviembre de 2016 y, lamentablemente, su historia no tuvo un final feliz.
PUBLICIDAD
«El tema es que era un zapato especial, porque era con los que aprendió a caminar. Apenas me di cuenta pregunté si había alguna estación que tuviera un baúl de objetos perdidos. Así que me dirigí a Vicente Valdés primero, luego a Plaza Egaña y por último Tobalaba. En ninguna estación sabían nada. Cuando volví a mi casa rendida, me di cuenta que se había perdido el otro también», recuerda con pena la madre que es comunicadora de profesión pero dueña de casa en la práctica.
Y es triste pues Gabriela no sabía que las cosas perdidas en Metro sí se pueden recuperar. O al menos, parte de ellos. Según la empresa de transporte subterráneo, cada mes se encuentra un promedio de 3.100 objetos que quedan olvidados y todos ellos ingresan a un sistema que permitiría volver a manos de sus legítimos dueños. En 2016, de hecho, llegaron a tener hasta 37.200 productos.
«Los documentos y objetos encontrados en las estaciones de la red son ingresados a un sistema online, donde cada jefe de estación los deriva a la Oficina de Atención al Cliente (OAC) que corresponde a la línea en la que fueron encontrados», explican a Publimetro desde la Estatal de transportes.
Agregan «en las OAC se hace una revisión de lo recibido y se da aviso a las personas que han extraviado algo empleando todos los canales posibles: teléfono, carta (si es que hay dirección en los documentos), a través de casas comerciales, bancos, casas de estudio y redes sociales».
El proceso es relativamente simple, pues si el personal de Metro logra contactarse con el dueño de las cosas, se le enviará una citación a una oficina para que recoja sus objetos, no sin antes firmar un documento que certifique todo.
Por otra parte, con si el producto está asociado con un RUT, las cosas podrían funcionar aún más rápidas. Ello porque la empresa de trenes subterráneos cuenta con el enlace http://www.metro.cl/atencion-cliente/consulta-objetos-perdidos, donde se puede consultar si es que hay coincidencias. Pero ojo, que esa herramienta dura sólo por 30 días.
PUBLICIDAD
Objetos raros
«Una vez perdí una mochila que estaba nueva, que adentro tenía un polerón y cervezas Gulden Draak, que es de origen belga», recuerda con Lástima José Contreras (29), comunicador audiovisual. Asegura que con un grupo de amigos «veníamos desde el Oktoberfest en Malloco, medios curados. Nos bajamos en Estación Central y dejé la mochila, cuando me acordé, el tren se fue», confiesa.
Ante tamaño descuido, ni siquiera hizo el intento de recuperar sus cosas. «El que se la encontró se fue con una mochila y ‘chelas’ de calidad, que yo creo que se las tomó al tiro», relata.
Pero sus cervezas de Bélgica no son las cosas más raras que se han olvidado en Metro. «Entre los objetos extraños encontrados podemos mencionar guitarras, raqueta de tenis, sombrero mexicano, un coche, un monitor de computador, un palo de hockey césped, una consola de videojuegos, una Tablet», sólo por mencionar algunas.
De hecho, en agosto pasado otra vez se encontraron cerca de 3 mil objetos más que siguen estando ahí, a la espera de que sus dueños las recojan. Y recuperarlos está, literalmente, a Metro de distancia.