Tres días de fiesta, gente durmiendo en carpas sobre el pasto, música, cuerpos pintados, droga y cerveza. Eso fue lo que se destacó en el mítico Festival de Woodstock realizado en agosto de 1969, en Estados Unidos. Y Chile, al parecer, tendría una instancia similar: el Carnaval Mil Tambores de Valparaíso.
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«Es un festival diverso, lleno de música, de color y de espacios educativos», dijo la encargada de programación, Bernarda Tapia. Y tiene razón pues dentro de sus planes se encuentra la realización de concursos de poesía y música, pasacalles barriales, campeonatos de fútbol, exhibiciones de piruetas de skate y presentación de cuerpos pintados, entre muchas otras actividades. ¿Es un festival similar al de Woodstock?
«Para mí, absolutamente», dice a Publimetro la artista fotográfica Patricia Fernández Jequier. Detrás de una cámara el año pasado tuvo la oportunidad de capturar imágenes de estas actividades y dice que actividades como esta son una invitación tanto a profesionales como a aficionados a que vayan a «disparar».
Más mesurado es Pablo Contreras (33), profesor de educación básica que el año pasado participó llevando marionetas en las calles bajo el alero del Centro Cultural la Greda de Huechuraba, en conjunto con Artevida de Colina.
«No diría que es el Woodstock, no lo sentí tan así», declara. Pero al mismo tiempo agrega que efectivamente hay un ambiente que se siente en el aire, donde la libertad y la alegría se apodera de la ciudad.
«Siento que es súper grato, súper rico, muy amplio, desde todas las aristas que se expresan, hay tinkus, hay bazucadas, hay comparsa, hay bandas de bronces, cuerpos pintados, entonces es súper amplia las expresiones dentro de lo que se vive el carnaval», expresa.
Críticas
Pero si es tan colorido ¿por qué lo critican tanto? Este jueves, el diputado Osvaldo Urrutia (UDI), interpuso un recurso de protección para evitar que el carnaval se desarrolle.
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Según él, las personas que participan de esta actividad terminan irrumpiendo en la propiedad privada, ensucian y generan molestia entre los habitantes de la Región de Valparaíso.
«Hay gente drogada y alcoholizada que hace lo que quiere en las calles. Las calles, los pasajes, las escaleras, se convierten en bares, moteles, en lugares para dormir», dijo a Emol Héctor Arancibia, representante de Comercio Unido de Valparaíso. ¿Es tan así?
«En regla, igual son espacios que se dan, no lo podemos desmentir», confiesa Contreras. «Son cabros que se fuman su pito, se toman su cerveza y se acampan en la playa» agrega. Enfatiza, de todas formas, que no es lo principal.
«Lo que es importante ahí es vivir el festival, porque es un espacio súper válido para construir. Allá te encuentras con un montón de gente con la que puedes hacer lazos, porque participan de actividades artísticas en otras partes e incluso, con estas agrupaciones te las encuentras después», declara.
Cuerpos pintados
La desnudez allá es un hecho. La actividad de cuerpos pintados, programadas para el domingo, es una prueba de ello, pero todo tiene un fin artístico. De hecho, la fotógrafa Fernández hace una invitación a que se participe de estas actividades.
«En Chile existe un miedo general al desenfreno» reflexiona, demostrando que ve con buenos ojos que se realicen instancias como esta.
«Hay una especie de despertar no sólo en Valparaíso, sino que en todo Chile. En San Antonio, en Santiago, en varias partes», enumera.
Contreras agrega que «yo igual invitaría a la gente a que participara porque son espacios culturales súper válido. La historia demuestra que a los chilenos nos han quitado los carnavales: nos quitaron la chingana, nos quitaron otras opciones. Entonces, es súper importante vivir estos procesos, pero siempre con el cuidado a la ciudadanía», advierte.
Desde el punto de vista fotográfico, Patricia se suma a esta invitación. «Es una instancia de practicar en vivo la fotografía de calle. Es muy ilustrativa de lo que está pasando en Chile con la llegada de los carnavales. A mí me gusta mucho».
Baños y organización
Desde la Municipalidad de Valparaíso comprometieron la postura de 100 baños públicos en lugares de alta aglomeración. Asimismo, emplazaron a la organización a cuidar y proteger a la comuna tras la realización del evento.
Por parte de la corporación Mil Tambores, Tapia dijo que «estamos desarrollando un plan para instalar puntos limpios» en sectores estratégicos. «Van a haber contenedores, puntos de reciclajes», agregó.
«Nosotros esperamos que la fiesta salga lo más linda posible», finaliza.
El festival comienza este viernes y finaliza el domingo 1 de octubre.