El viernes 6 de octubre, a eso de las 20:00, José Wilson Cotrina Rodríguez (40), conductor del recorrido 225 de Subus, fue brutalmente agredido con al menos 11 puñaladas en su pecho, cara y ojos. El conductor, que trabaja para los servicios del Patio Santa Rosa, terminó internado en la Mutual de Seguridad donde se encuentra con riesgo vital.
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Eso fue lo que motivó a los representantes de varios sindicatos de Transantiago a llegar a eso de las 11:00 a la Intendencia Metropolitana para exigir mayor seguridad a bordo de las máquinas.
Antes de que se gestara este encuentro, de todas formas, ya había varios buses con vidrios pintados con la leyenda «alerta». Ello pues -trascendió- los conductores no descartarían un eventual paro.
Necesitan donadores
Según cercanos a Cotrina, su estado de salud sería el riesgo vital. El conductor, que recibió las puñaladas por razones que aún se desconocen, habría perdido más de 3 litros de sangre y por ello, ya hay varios choferes haciendo un llamado a donar a su nombre en la Mutual de Seguridad.
Conocidos del herido habrían indicado, a través de redes sociales, que este sería padre de una bebé de sólo 20 días, además de dos hijas de 11 y 15 años.
No se conocen detalles de los autores de la agresión.