La ciudad de Valdivia es reconocida por sus cervezas artesanales, sus parques verdes y sus ríos que atraviesan la perla del sur. Fue exactamente en la costanera en lugar en que un hombre ebrio tomó una serie de decisiones que le costaron terminar durmiendo en un calabozo.
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Según testigos el hombre estaba bebiendo a un costado del río cuando de improviso decidió saltar a una embarcación de la Armada. El bote zodiac estaba atracado en el muelle Schuster listo para operar en caso de emergencia. El individuo desató el vehículo, arrancó el motor y navegó por el afluente.
La Armada se percató rápidamente e inició una persecución acuática en la que lograron subir al bote robado. Según consigna el diario Austral de la Región de Los Ríos, después de ser retener al hombre llamaron a Carabineros para que realizaran la detención correspondiente.
El espectáculo del «borracho del bote» no terminó allí porque al momento de llegar la policía mordió en el brazo derecho de un sargento.
Como era de esperar el hombre debió dormir en un calabazo la noche del sábado para después ser formalizado por «hurto de especie que afecta al servicio de una institución armada, que no forma parte del material de guerra» y también, por «maltrato a obra de Carabineros».
El tribunal decretó que el individuo quedara con firma quincenal y arraigo nacional. Se dispuso un plazo de investigación de 60 días.
