Los incendios del verano pasado tuvieron un alto impacto en la flora y fauna nacional. Gracias al trabajo coordinado entre la Corporación Nacional Forestal, CONAF, y Bomberos de Chile, la situación se controló. Sin embargo, el costo fue altísimo. No sólo flora y fauna. Viviendas completas e incluso un pueblo entero fueron consumidos. En la búsqueda de estar mejor preparados para situaciones de esta magnitud, ambas instituciones firmaron un protocolo.
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El fin es robustecer, fortalecer, orientar y coordinar las acciones conjuntas. Tanto a nivel nacional como regional. Además de incrementar la protección de las personas, la integridad de sus bienes y la conservación de valores y recursos del medio ambiente frente al peligro de incendios forestales.
Funcionamiento organizado
Este protocolo establece la creación de dos comités. El primero de coordinación nacional. Éste tendrá como tareas principales acordar orientaciones operacionales y protocolos regionales, tanto en la interfaz urbana forestal como en otros terrenos rurales.
Además de proponer o establecer medidas de coordinación y mutua asistencia y supervisar las acciones acordadas y mantener actualizado estos acuerdos.
La importancia de este protocolo
Para el Director Ejecutivo de CONAF, Aarón Cavieres, “ambas instituciones son los grandes actores que combaten los incendios forestales y la necesidad de articulación, de seguir trabajando en conjunto, como lo hemos venido haciendo y sobre todo a la luz de lo que se avecina, es urgente fortalecer los lazos”.
Además, agregó que este protocolo tiene un fuerte trabajo local por parte de ambas instituciones. “El trabajo desde el nivel local es prioritario. Mientras más cerca estemos para enfrentar el ataque inicial existen mayores posibilidades de éxito, y en ese sentido la articulación a nivel base es urgente”, señaló Cavieres.
Por su parte, el Presidente Nacional de Bomberos de Chile, Miguel Reyes Núñez, sostuvo que “el último convenio con CONAF data de 1993 y ahora se ha actualizado porque hay una mayor frecuencia de incendios, que requieren del trabajo conjunto de ambas instituciones». «El propósito de esta firma es proteger tanto a las personas como al medio ambiente frente a los incendios forestales y así poder coordinar en conjunto las labores a nivel central, regional y local”, agregó Reyes.
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Comités regionales
Los comités regionales impulsarán las bases para establecer el Sistema de Comando de Incidentes. En especial en lo referido a Mando Único y Comando Unificado, según se acuerde en el Protocolo Regional. Se acordarán procedimientos para la recopilación de información estadística.
El objetivo es prestarse mutua asistencia en aspectos materiales y de gestión, en función de las capacidades y competencias de ambas partes. Por supuesto, siempre que exista la disponibilidad presupuestaria y material para que esto sea posible.
