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Los presidenciales que se quedaron cortos “festejan y evalúan” su futuro en la política chilena

Desde los diferentes comandos de campaña, se vivió un ambiente agridulce, tras la definición de los dos cupos a la ansiada segunda vuelta.

Seis chilenos, cuatro hombres y dos mujeres, pusieron lo mejor de si para intentar llegar a ocupar uno de los dos cupos a la segunda vuelta que protagonizarán Sebastián Piñera y Alejandro Guillier el próximo 17 de diciembre.

La periodista Beatriz Sánchez del Frente Amplio se mostró satisfecha, pese a no haber alcanzado el ansiado boleto a la gran final. La comunicadora que hasta hace horas casi se le veía sola en sus recorridos por terreno, hoy estaba rodeada por partidarios que coreaban su nombre.

«La gente fue a votar contra todos los que dijeron que no se podía. Vamos a seguir trabajando incansablemente, de puertas abiertas dialogando, sin sentirnos que estamos allá arriba. El Frente Amplio llegó y para quedarse. Fueron fuerzas desiguales a las que nos enfrentamos y aún así hicimos la pega».

La comunicadora recordó que un diario dijo «se acabó la magia y yo les digo hoy que la magia llegó para quedarse. Yo exijo una explicación a las encuestadoras».

Por su parte, Carolina Goic, abanderada de la democracia Cristiana, reconoció que este no fue el cuadro que ella había imaginado : «Nos es el resultado que esperábamos en nuestra candidatura, es un mal resultado, siempre he sido una mujer que he dado la cara, que he ido de frente por la vida en situaciones complejas”.

La carrera iniciada en marzo por la senadora por Magallanes finalizó este domingo, con una candidatura que jamás registró doble dígito, que apenas tuvo un leve repunte a propósito de la polémica con el diputado Ricardo Rincón, acusado de violencia intrafamiliar. «Una campaña con ética» no fue suficiente para que la sobreviviente de un cáncer mamario llegara a la segunda vuelta.

“No va a ser esta la ocasión en que no reconozca las cosas por su nombre, no era el resultado que esperábamos y ya habrá tiempo para hacer el análisis”, agregó la dirigente DC, que es esperaba de vuelta al redil de la Fuerza de Mayoría, aunque muchos de su capital político pasará a las manos de Piñera.

José Antonio Kast, uno de los grandes vencedores de la jornada, saludó a sus seguidores con la convicción de que su repunte en las votaciones le servirá como aval para «influir» en el abanderado de Chile Vamos. De hecho, Piñera saludó «de manera especial» a Kast, un ultraderechista consumado.

«Es el tiempo de Guillier», fue la frase emblemática del ex «niño terrible» de la política chilena, Marco Enríquez-Ominami, el mismo que reconoció el triunfo del abanderado de la Fuerza de Mayoría, y de este manera no ofrece libertad de voto y le indica con claridad meridiana a sus seguidores, el destino de sus votos para el domingo 17 de diciembre. «Transparento que votaré por él (Alejandro Guillare) en segunda vuelta, y me pongo a su disposición. Soy un soldado, un soldado que no le tiene miedo a Sebastián Piñera», aseguró MHO.

Alejandro Navarro, senador  por Bíobio y presidente del partido País, dijo que se mantendrá firme contra las AFP, que «tenemos cuatro años por delante, para evaluar escenarios», con lo cual asoma una nueva incursión presidencial.

Eduardo Artés de la Unión Patriótica manifestó que ni apoyará a Piñera, ni la Guillier «y incluso si Beatriz Sánchez hubiese pasado, tampoco la apoyaría».

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