El ex Presidente de Uruguay, José «Pepe» Mujica, se reunió con el candidato presidencial de Fuerza de la Mayoría, Alejandro Guillier, en un café del Paseo Bulnes, para entregarle su apoyo de cara al balotaje.
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El ex mandatario charrúa concentró sus palabras en dos ejes: la necesidad imperiosa de la unidad entre las fuerzas progresistas, en un claro llamado al bloque oficialistas y al Frente Amplio, y también recalcó la necesidad de la convivencia entre el bloque de izquierda con las fuerzas “conservadoras”, pues ambas “se necesitan”.
“Y a veces uno apuesta a todo o nada, y en general cuando se apuesta a eso, es nada (…) a los que son medianamente progresistas o de izquierda, solamente memoria, que recuerden que Hitler llegó al poder porque los de izquierda se mataban entre ellos en vez de pelear contra Hitler, que Franco se aburrió y murió en una cama porque en lugar de defender con toda la república española se dedicaron a pelearse entre ellos”, indicó.
“El eterno problema de la cara progresista es la unidad, y el eterno peligro y flagelo, por eso, quiéranse un poco más y sepan lo que está en juego, el tiempo lo dirá”, planteó.
Asimismo, el ex jefe de Estado envió sus “felicitaciones al pueblo chileno” y aseguró que “muy probablemente ustedes no son conscientes, no se dan cuanta que se dan el privilegio de tener una elección entre dos ciudadanos calificados”.
“Conocí al señor Piñera y tuve la mejor relación como latinoamericanos y como vecinos, pero mi corazón, mi manera de pensar, está siempre con el campo progresista, me considero ciudadano de América Latina y mis sueños trabajan para un mundo que yo no veré, y es que los latinoamericanos vayan construyendo su nación”, acotó.
Mujica también habló a las nuevas generaciones, afirmando que “hay que defender la política, porque Aristóteles dijo que el hombre es un animal político, porque es gregario, no puede vivir en soledad, necesita sociedad y la existencia de sociedad, que es imprescindible para nuestra vida, supone conflicto. Siempre va a haber conflicto y alguien tiene que manejarlos para que persista la sociedad, ese es el papel de la política”.
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“Los hombres pasamos, las causas quedan”, acotó, y continuó, “cuiden la convivencia, aprendan a tolerarse, luchen por eso, nada hay perfecto, lo que viene no es ni el paraíso ni el infierno, es la escalera de la vida con la que hay que luchar para subir escalones, de a poquito”.
Consultado de por qué le entregó su respaldo a Guillier, manifestó que “yo apoyo todo lo progresista en el mundo, tengo una inclinación filosófica porque me gasté la vida luchando por el reparto, tratando de contribuir a tener un mundo un poco más de iguales, cometí muchos errores y nos quedaron muchas cosas en el programa, pero logramos que la sirvienta tenga jubilación, que los peones rurales tengan jubilación, no cambiamos el mundo, pero algo hicimos”.
“Por parentesco en materia de sentir y de pensar estoy acá, pero no estoy por ser enemigo de fulano o mengano, no soy enemigo de nadie”, añadió.
Según Mujica, “mi interpretación de la historia es que siempre ha existido una cara conservadora de la historia y una cara de cambio, como somos petulantes los hombres, decimos izquierda o derecha (…) Todos tenemos errores, la cara conservadora cuando se pone muy dura se transforma en fascistoide, que no es lo mismo conservador que fascista, y la cara mía, a la que yo pertenezco, cuando se llena de corazón y de buenas intenciones en demasía, se pone a querer repartir lo que no existe y cae en el infantilismo frecuentemente y confunde realidad con sentimiento y va más delante de lo que se puede”.
“Todos tenemos, los seres humanos nos movemos adentro de esa dialéctica, por eso yo pertenezco a una visión de la historia, por eso estoy acá, pero no le tengo odio a mis adversarios”, puntualizó.
El ex mandatario uruguayo llegó a Chile la tarde de ayer y participó en un acto de campaña con Guillier en Valparaíso, además, durante esta jornada se reunirá con la Presidenta Michelle Bachelet en La Moneda.