Durante la noche del lunes nueve personas fallecieron en Irán en enfrentamientos entre manifestantes y las fuerzas de seguridad, informó la televisión estatal de la República Islámica el martes. Pero ¿qué es lo que ha provocado esta ola de protestas?
PUBLICIDAD
Las manifestaciones, las más multitudinarias en Irán desde la disputada elección presidencial de 2009, comenzaron el pasado jueves en Mashhad por la debilidad de la economía iraní y el aumento del precio de la comida.
En los incidentes de los últimos días, enemigos de Irán utilizaron varios medios -incluyendo dinero, armas, política y aparatos de inteligencia- para crear problemas en el sistema islámico”, ayatolá Alí Jamenei
Estas se han expandido a varias ciudades, donde algunos asistentes corearon consignas contra el presidente y Jamenei. Cientos de personas han sido arrestadas y un destacado juez advirtió el martes que algunas podrían enfrentar juicios por pena de muerte.
Los precios de varios artículos, como el huevo, se ha elevado hasta en 40% en los últimos días, y los granjeros culpan del aumento al incremento del precio de los piensos importados.
Las aves domésticas son una parte importante de la dieta de muchos de los 80 millones de habitantes de Irán, y alzas anteriores han causado problemas políticos a sus líderes en varios periodos tras la revolución islámica de 1979.
Lo mismo sucede con la inflación, que el Banco Central de Irán asegura que ha regresado a 10%. El desempleo entre jóvenes se mantiene en un nivel alto.
PUBLICIDAD
Contra el ayatolá
Sin embrago, a medida que pasaron los días la movilización tomó ribetes más políticos pidiendo el fin del gobierno clerical (religioso) . Según consigna BBC Mundo, «se han escuchado consignas a favor de la remoción e incluso la muerte del Líder Supremo de Irán, el ayatolá Alí Jamenei».
El presidente, Hasán Ruhani, reconoció el malestar público sobre la alicaída economía de la República Islámica, aunque él y otros advirtieron que el gobierno no durará en reprimir a quienes considere que incumplen las leyes.
Hasta el momento, ninguna de las manifestaciones recibió autorización previa del Ministerio de Interior, lo que las convierte en ilegales a ojos de la justicia iraní.
Agentes extranjeros
Durante sus primeras declaraciones desde el inicio de la crisis, el líder supremo, el ayatolá Alí Jamenei, acusó el martes a los “enemigos de Irán” de entrometerse en los asuntos del país.
En comentarios publicados en su cibersitio oficial, Jamenei pareció culpar a las naciones extranjeras por, al menos, exacerbar los disturbios.
“En los incidentes de los últimos días, enemigos de Irán utilizaron varios medios -incluyendo dinero, armas, política y aparatos de inteligencia- para crear problemas en el sistema islámico”, dijo.
Temprano el sábado, Trump tuiteó su apoyo a las protestas. «Hay muchos informes de protestas pacíficas de ciudadanos iraníes, hartos de la corrupción del régimen y del derroche de la riqueza nacional para financiar el terrorismo en el extranjero», escribió.
Horas después, la televisión estatal dijo: «Los grupos contrarrevolucionarios y los medios de comunicación extranjeros continúan sus intentos organizados para abusar de los problemas económicos y de sustento de la población y sus demandas legítimas a fin de que efectúen reuniones ilegales y que posiblemente se caiga en el caos».
La ola reciente de protestas ejerce presión al presidente Hassan Rouhani mientras el acuerdo nuclear que alcanzó con varias potencias, entre ellas Estados Unidos, sigue en riesgo.
La economía iraní ha mejorado desde que el acuerdo internacional alcanzado en 2015 retiró sanciones que pesaban sobre el país, pero los efectos positivos aún no llegan al pueblo iraní.