Uno de los beneficios laborales más valorados por los chilenos es la flexibilidad horaria, sobre todo en meses como enero y febrero donde gran parte de los colaboradores decide tomar vacaciones, mientras que el resto permanece en su lugar de trabajo.
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Sin embargo, esta práctica no es mayoritaria. Así al menos lo evidencia una encuesta elaborada por la empresa de recursos humanos, Adecco, que señala que este año el 25% de los trabajadores afirmó tener horario de verano en su lugar de trabajo. De ellos, un 14% trabaja mediodía los viernes, mientras que un 11% asegura que la salida del trabajo se adelanta en una hora los viernes.
Suyin Palma, directora de Bienestar y Responsabilidad Social Corporativa de firma, explica que este beneficio «es una manera de incentivar a aquellos trabajadores que no se toman descanso durante meses de altas temperaturas y en que la carga laboral se pueden acentuar, debido a los reemplazos y labores extras que deben ser asumidas”.
Factor millennial
La especialista añade que en el caso de trabajadores jóvenes como los millennials, esta es una herramienta motivacional muy efectiva, ya que para ellos es muy relevante contar con horarios que les permitan balancear su vida personal y profesional.
«Los colaboradores que cuentan con estos incentivos se sienten más valorados y comprometidos con sus labores», afirma la experta
Sobre este punto, Palma agrega que “los colaboradores que cuentan con estos incentivos se sienten más valorados y comprometidos con sus labores, lo que se traduce también en un aumento en la productividad y un mejor ambiente laboral al interior de las empresas”.
“Este tipo de beneficios otorga resultados positivos, siempre y cuando las funciones del cargo y el sector productivo en el cual se desempeña la empresa así lo permitan”, concluye la experta.
La encuesta consideró a más de 2.000 trabajadores a nivel nacional.