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¿Cómo es el test cognitivo que evaluó la salud mental de Trump?

El mandatario se habría sometido de manera voluntaria, según el médico, al examen de evaluación cognitiva de Montreal para acallar los rumores respecto a su estado mental

«Excelente» fue la palabra que utilizó el médico de la Casa Blanca, Ronny Jackson, para calificar la salud mental del presidente de Estados Unidos, Donald Trump.

El mandatario de 71 años obtuvo la calificación máxima tras someterse por decisión personal al test de evaluación cognitiva de Montreal (MOCA, por sus siglas en inglés), en el marco del chequeo médico que se realizó el pasado viernes.

“No veo ninguna razón en absoluto para pensar que el presidente pueda tener ningún problema con su razonamiento (…) Su mente es muy aguda, está intacta”, indicó el médico de acuerdo con La Vanguardia.

El examen MOCA, que data del 2005, contempla ocho secciones donde se analiza la capacidad visuoespacial/ejecutiva, identificación, memoria, atención, lenguaje, abstracción, recuerdo diferido y orientación.

Entre las preguntas empleadas para calificar la salud mental de los pacientes se considera el reconocimiento de animales, el dibujo de un reloj con una hora determinada, saber en que día y lugar se encuentra, dar un golpe cada vez que se diga la letra A y memorizar palabras, entre otras cosas.

MOCA está diseñado para realizarse en 10 minutos, sirve para detectar problemas leves como pérdida de memoria o dificultades de atención y considera un máximo de 30 puntos, siendo 26 el mínimo que saca una persona con capacidades cognitivas normales.

Dudas

La salud mental del presidente estadounidense fue ampliamente criticada por el la opinión pública luego de la publicación del libro «Fuego y Furia», escrito por el periodista, Michael Wolff. El texto evidenciaba la actitud infantil actitud del presidente, su ignorancia, «incapacidad mental», sus altibajos anímicos, entre otras cosas.

La serie de tuits que a publicado contra Kim Jong-un, sobre todo en el que se vanagloriaba de tener un «botón nuclear más grande», y la última polémica en la que se afirmaba que trató como «países de mierda» a naciones africanas, El Salvador y Haití, habían acrecentado las dudas respecto a su salud mental.

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