Un tren de cercanías con cientos de pasajeros a bordo descarriló el jueves por la mañana en el norte de Italia, causando al menos tres fallecidos, 10 heridos y varios atrapados a las afueras de Milán, según funcionarios.
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El accidente del convoy Trenord ocurrió en la estación Pioltello Limito, en las afueras de la ciudad, y paralizó el tráfico de entrada y salida a la capital financiera de Italia durante horas. Al menos dos vagones del centro del tren se salieron de las vías y quedaron en pie aunque ladeados. Los equipos de rescate treparon con cautela por ellos ayudando a los pasajeros atrapados en el tren a ponerse a salvo.
Al menos tres personas fallecieron, otras 10 sufrieron heridas graves y docenas más padecían lesiones menores, dijeron fiscales en el lugar del accidente. El tren cubría el trayecto entre Cremona, en la parte oriental de la región de Lombardía, y la estación Garibaldi de Milán, y descarriló en un cambio de vía, lo que sugiere que la vía podría haber tenido algo que ver en el accidente, dijo un funcionario local.
Los pasajeros dijeron que sintieron como el tren se sacudía unos minutos antes de escuchar un fuerte ruido, y luego notaron como el coche los aplastaba.
Trenord es la compañía de trenes regionales que opera en Lombardía. Es conocida entre los pasajeros por la suciedad de sus trenes, sus vagones abarrotados y frecuentes demoras. Las redes sociales se mofaron de la firma el jueves tras decir en Twitter que las demoras en las llegadas a Milán se debían a un “problema técnico” con un tren.
Este fue el último incidente en la avejentada red ferroviaria italiana. En 2016, 23 personas perdieron la vida tras el choque de dos trenes en una única vía en un olivar en Puglia, en el sureste del país. En 2009, 32 personas murieron cuando un convoy de mercancías cargado de gas licuado se salió de la vía y explotó en Viareggio, en la Toscana.
