El precio de las paltas ha llevado a muchos, a modo de broma, a pedir que se paguen algunos sueldos con este fruto incluso por sobre las criptomonedas. Es que su textura es vital para platos tan deseados por los chilenos como el completo italiano, el churrasco o -para los más finos- la palta reina o el tan apetecido sushi. Eso fue seguramente lo que llevó a dos sujetos a robar al menos dos sacos desde un predio ubicado en el sector de San Isidro en Quillotra, Región de Valparaíso.
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Todo comenzó durante la jornada de este lunes 29 de enero cuando uno de los implicados en el hecho escaló a un árbol de una propiedad privada con el objetivo de cortar alevosamente las unidades de palta, según indica La Estrella de Quillota.
Tratándolas como si fueran el más fino cristal, las bajaba del árbol para evitar que se dañaran y las metía en un saco, tal como lo hacen los ladrones de la televisión.
Detención
No fue necesario que vistiera un traje de negro con rayas blancas, un pasamontañas o que la bolsa tuviera el signo dólar para que los vecinos del sector notaran que ese hombre andaba delinquiendo. Por eso, una decena de ellos se pusieron de acuerdo para hacer justicia con sus propias manos.
De esta manera, el grupo de quillotanos lo retuvo con el “oro verde” dentro de un saco como evidencia.
Así al menos lo indicó al medio regional Vladimir Benavides, Jefe de la Brigada de Investigación Criminal de la PDI de Quillota. “Los vecinos descubrieron en flagrancia a un sujeto que estaba arriba de un árbol, siendo retenidos por ellos”.
Otro implicado
Como los detectives se quedaron con la duda respecto a cómo iba a ser vendido el botín, realizaron diligencias en las inmediaciones y encontraron a otro sujeto sospechoso. Fue el testimonio de algunos sanguchitos de palta -mayormente agricultores y trabajadores del predio- quienes permitieron su detención, pues se consideró que también estaría involucrado en el robo del fruto verde.
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Las paltas hurtadas alcanzaron, según la PDI, un avalúo cercano a los $100 mil. Los detenidos fueron puestos a disposición de la Justicia y sus nombres quedaron en reserva. Las unidades robadas fueron devueltas a su legítimo dueño.
Cabe precisar que esta no es la primera vez que alguien se tienta con robar este tipo de alimentos. Ya en 2016 se reportó un aumento de robos de palta en Nueva Zelanda, a causa de lo sabroso de su textura.
