Sin dudas, algo fundamental en la definición de una cultura es la manera en que ésta se comunica. En Chile, las primeras incursiones de extranjeros en la creación de medios de comunicación fueron en la primera mitad del siglo XX.
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La disolución del imperio Otomano repartió por el mundo a emigrantes sirios, libaneses y palestinos y Chile pareció un buen lugar para residir. De esa exploración nació el periódico Al Murchid, que significa «El Guía» en árabe. Ésta fue la primera piedra de la construcción de los medios migrantes en el país.
Los medios extranjeros en Chile se «durmieron» debido a las condiciones demográficas. Sin embargo, despertaron de la mano de la creciente llegada de extranjeros al país, que según el censo 2017 se alzan por sobre los 600 mil.
Colombia
La sabrosura de este país también se imprime a través del periódico «Colombia 30 días», que lanza 5 mil copias mensuales en las ciudades chilenas con mayor concentración colombiana.
El contenido tiene un poco de todo, pero gira en torno a la comunidad y sus principales actividades culturales. «Para mí ha sido una gran oportunidad mostrar su cultura . Es súper bueno que existan medios que mantengan a las comunidades informadas e integradas», dice a Publimetro Bianca Szecowka, su directora.
Venezuela: los más motivados
Los exreanjeros provenientes de este país corresponden al grupo que mayor cantidad de audiencia abarcan en el territorio, porque se desplazan a través de tres plataformas.
Cuando Pablo Colmenares llegó a Chile, en septiembre de 2015, quería desempeñarse en lo que él y su esposa hacían en su querida Venezuela: locutear en la radio. Pero el escenario se les volvió cuesta arriba cuando quisieron trabajar en radios chilenas, así que fueron por más.
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Once meses después de su llegada, la sala de su casa le dio vida a la señal online de Radio Chévere. «Si le preguntas a cualquier chileno cuál es la palabra característica de un venezolano te dirá «chévere», dice Pablo, director del medio.
Quisieron crear un medio masivo para abarcar a los más de 32 mil compatriotas bolivarianos residentes en el país, con un sello distintivo y con profesionales de la comunicación y otras áreas. «Quisimos traer a Chile un pedacito de Venezuela», expresó.
El mismo objetivo tenían desde el área escrita, donde escriben 4 mil ejemplares del periódico «Vino Tinto». Es la primera incursión comunicacional de los caraqueños en el país y se decidieron a fundarlo en 2016.
La iniciativa impresa es repartida gratuitamente en los principales negocios caribeños de Santiago cada 15 días. Además, el medio cuenta con una sección de consultas legales a un abogado que resuelve dudas a través de internet.
Desde otra plataforma, la digital, también elevan la voz los venezolanos residentes en nuestro país. El medio «Venezolanos en Chile» se sustenta en un canal de youtube y su contenido va desde videos tutoriales para obtener la visa definitiva hasta entrevistas a exponentes de su país, como el cantante Nacho.
Un total de 35 videos elaborados que no tienen nada que envidiarle a los canales de televisión nacionales.
Perú
Cuando Jorge Gotelli estaba almorzando en uno de sus restoranes favoritos y, en ese momento, un argentino vio su periódico exclamó: «¡Qué buen diario!». Acto seguido la dueña del local le dijo: «Mira, ahí está el director del diario, háblale». El transandino se le acercó sólo para felicitarlo. «No sabe usted la importancia que le da a sus connacionales», le dijo al comunicador, marcándolo para siempre.
El medio «El Sol» le da voz a la comunidad peruana residente en Chile y funciona sin interrupciones desde hace 13 años. «Nosotros lo hemos sacado adelante todos los meses y esto es un proyecto familiar», dice Ana Cabillo, editora del medio que se reparte gratuitamente de manera mensual en los principales establecimientos y la embajada peruana.
Haití
La radio también fue una opción para los haitianos, que comenzaron su aventura tras varias caídas. Finalmente la opción llegó a puerto en la ciudad de San Felipe, donde un ingeniero creó la señal online Radio Aconcagua Haití.
El fin del medio va mucho más allá de la música y se concentra en la exposición de ofertas de trabajo para haitianos y haitianas residentes en Chile.
