No hay campaña a favor de la vida sana ni disco pare que frene el gusto de las personas por la chatarra. Así al menos lo refleja el último informe de ventas de comida rápida del Departamento de Estudios de la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo de Chile (CNC).
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En el cuarto trimestre de 2017 se registró un crecimiento anual de 3,4%, considerando el total de locales y pese a que está por debajo del alza de 7,5% del tercer cuarto del año, el indicador cerró el año con un alza de 5,5% real superando el crecimiento de los tres años anteriores.
Por otro lado, las ventas reales medidas en términos de locales equivalentes (concepto de Same Sale Store), se debilitaron en el último trimestre de 2017, cayendo en el margen un 0,6% real anual, tras el alza de 2,2% del trimestre anterior. Así, el índice cerró el 2017 con un nulo crecimiento (0,1%).
Ventas en Región Metropolitana y Regiones
En la Región Metropolitana las ventas reales de comida de servicio rápido en función del total de locales también se desaceleraron el último cuarto del año, registrando un alza real de 3,8% anual, tras crecer un 8,3% en el tercer trimestre.
En cuanto al cierre del año, se anotó un alza de 5,9% el 2017, superando el 2016 y marcando la mayor alza desde 2013.
El mayor número de locales en comparación con igual período de 2016, afectó también al indicador en términos de locales equivalentes de la Región Metropolitana, registrando, en el cuarto trimestre, una caída real anual de 2,1% y cerrando el semestre con una baja de 1,7% real, caída menor eso sí a la registrada en el primer semestre, y acumulando durante el 2017 una baja de 3,4% real anual.
En tanto, en regiones y considerando el total de locales, se desaceleraron respecto del tercer trimestre, al crecer un 2,6% real en el último cuarto del año. El resultado está influido en parte por una alta base de comparación, al haber crecido un 9,4% en igual período de 2016. De esta manera cerraron el 2017 con un incremento de 4,9%, en línea con el año 2016.
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En términos de locales equivalentes, las ventas reales aumentaron un 1,2% anual en el último trimestre de 2017, desacelerándose fuertemente respecto del trimestre anterior (7,0%) y por debajo también del alza registrada en igual trimestre de 2016.
Este resultado está influido por la apertura de un mayor número de locales en comparación con igual período de 2016. El semestre cerró con un crecimiento de 4,0%, menor a la primera mitad del año, y acumulando en 2017 un alza real anual de 4,8%, superando el resultado de 2016 (3,3%).
¿Cuánto se pagó?
El reporte de la CNC señaló que el consumo promedio por boleta alcanzó un valor de $4.827 en el último trimestre de 2017, lo que determinó un aumento real de 5,1% respecto del mismo período de 2016. A nivel semestral el consumo promedio aumentó un 6% real anual en la segunda mitad de 2017, alcanzando los $4.795.
En la Región Metropolitana el gasto durante el último trimestre de 2017 fue de $4.935, creciendo un 4,8% real anual y cerrando el semestre con $4.938, lo que implica un alza de 6,3% respecto de igual período de 2016.
El consumo promedio de regiones durante los últimos cuatro meses del año alcanzó los $4.720, lo que determinó un incremento real anual de 5,4%. Por su parte, el semestre cerró en regiones con un consumo promedio de $4.650, lo que implica un alza de 5,7% real respecto de la segunda mitad de 2016.
A juicio de Bernardita Silva, Gerenta de Estudios de la CNC, las ventas de comida de servicio rápido mostraron una desaceleración en el último trimestre de 2017 respecto del período anterior, resultado influido en parte por una mayor base de comparación, ya que fue precisamente el último cuarto de 2016 el período más fuerte del año.
“En cuanto al cierre anual, el sector marcó un alza de 5,5% en ventas totales en 2017, la mayor alza en los últimos cuatro años, en línea con la recuperación de las confianzas de los consumidores vista durante el 2017. Sin embargo, dada la mayor cantidad de locales, las ventas medidas en locales equivalentes tuvieron prácticamente un nulo crecimiento, y en el caso de la RM se registró la mayor baja desde el inicio del Índice en 2004”, añadió la ejecutiva.
Es más, para la economista “estos resultados del sector están en línea con lo vistos en el sector comercio durante el último trimestre de 2017, cuando el Índice de Ventas Minoristas (CNC) también marcó una desaceleración el último cuarto del año”, ligado según ella al menor «arribo y en el gasto de argentinos a nuestro país».
