Las altas temperaturas de esta época del año hacen que las piscinas resulten muy atractivas para que los niños acudan a refrescarse. Si bien se trata de un panorama muy entretenido, es indispensable tomar en cuenta algunas medidas para evitar accidentes.
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Conversamos con el pediatra Carlos Chavarry de Vidaintegra, quien nos señaló las precauciones que deben tomar los padres cuando sus hijos juegan en playas y piscinas.
¡Hay que estar atentos!
Los menores son inquietos, rápidos y creativos, por lo que nunca hay que perderlos de vista. Especialmente en esta temporada, cuando las piscinas se transforman en el panorama favorito de todos.
“Bastan dos centímetros de profundidad y haber estado sumergido dos minutos bajo el agua para lamentar consecuencias fatales en los lactantes y niños pequeños”, adviertió el especialista.
Los tips
1.- Cuidado con los lactantes:
Antes de los seis meses, los bebés son extremadamente vulnerables a la exposición al sol y no se aconseja el uso de cremas solares protectoras. Por tanto, lo mejor es mantenerlos a la sombra.
Tampoco se recomienda bañarlos en piscinas, ya contienen cloro y otros químicos e impurezas que pueden afectar su delicada piel.
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Un recurso muy utilizado por los papás es el de la piscina inflable con un poquito de agua para que el menor pueda jugar allí tranquilamente con sus juguetes, en baños que no deben superar los diez minutos.
2.-Ojo con la edad para aprender a nadar:
Se estima que lo recomendable es a partir de los 4 años, ya que antes de esa edad resulta necesario evaluar el desarrollo caso a caso.
“Que aprendan a nadar no significa que se saquen necesariamente las manguitas o el chaleco salvavidas, tampoco que dejen de ser supervisados por un adulto. Los accidentes ocurren en las situaciones más inesperadas y toda precaución nunca está demás”, afirma el especialista.
3.- Cuida el tiempo de reposo después de comer
Es necesario realizar un descanso de 45 minutos luego de ingerir alimentos o una comida principal, como puede ser el almuerzo, para evitar calambres o dolor abdominal.
Esto es indispensable si el niño va a nadar y también si solo se va a «mojar las patitas», porque puede entusiasmarse y sumergirse en la piscina.
4.- Evita certos juegos peligrosos
Se debe evitar que niños y grandes corran en los bordes de las piscinas y plataformas como trampolines para evitar caídas o resbalones.
De igual manera, no se recomienda practicar piruetas y juegos como chinas, piqueros, clavados de cabeza y mortales, porque se pueden producir graves accidentes.
5.- Vestimenta adecuada
Los menores deben ocupar sombreros que los protejan del sol y ropa de algodón, idealmente que sea de manga larga y color blanco.
Además, en el agua se sugiere el uso de gorras para prevenir otitis y de lentes para evitar el contacto de los ojos con el cloro.
6.- Factor solar adecuado
Aplicar factor solar 50 en el momento de llegar a la piscina, ya que si se hace antes, podría quedar adherido a la ropa del menor. Es importante repetir esta medida cada media hora, se bañe o no.
7.- Hidratación, secado y ducha
Es importante que los menores se hidraten mientras estén expuestos al sol y se realicen un secado post baño, que incluya el cambio a un traje de baño seco, como también darles abrigo para que no se resfríen por cambios de temperatura.
Asimismo, se aconseja que se duchen después de la piscina para eliminar químicos como el cloro y las impurezas del agua.
8.- Consultar al médico a tiempo, si hay molestias tras estar en la piscina
Lleva a tu hijo a un médico si presenta dolores fuertes de oídos, lesiones importantes en la piel producto de la exposición al sol o una insolación.
Asimismo, si tiene diarrea y/o o gastroenteritis que pueden gatillarse por la ingesta de agua de piscina.