En poco más de medio año, la organización estadounidense neonazi Atomwaffen Division -en alemán: división de armas nucleares- ha pasado del anonimato a estar relacionada con al menos cinco muertes, la creación de explosivos para atacar una sinagoga y el plan para un atentado terrorista contra una planta nuclear.
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El también grupo paramilitar fue fundado en Florida en el año 2015 y cuenta actualmente con unos 80 miembros. Su mensaje, difundido a través de su web (www.atomwaffendivision.org) y las redes sociales, es un llamado a la “lucha de razas” y la “revolución blanca”. Pretenden derrocar al gobierno estadounidense y establecer un régimen nazi en el país norteamericano. La organización, además, idolatra al líder nazi Adolf Hitler y al asesino y supremacista blanco, Charles Manson.
En mayo del año pasado, Devon Arthurs (22), un miembro de este grupo, amenazó con disparar a los clientes de una tienda. Si bien no llegó a dañar a nadie, tras ser arrestado confesó haber matado a tiros a sus dos compañeros de piso Jeremy Himmelman (22) y Andrew Oneschuck (22). La policía llegó al departamento que los tres compartían y halló los dos cadáveres. Además, encontraron a Brandon Russell (22).
Russell, líder del grupo neonazi y también compañero de piso de los anteriores, fue arrestado en mayo del año pasado y sentenciado en enero a cinco años de cárcel por poseer y almacenar explosivos en un apartamento. Desde prisión, la fiscalía estadounidense accedió a las cartas que Russell enviaba a otros miembros de la Atomwaffen Division. Estas muestran que no ha abandonado su “ideología violenta”.
“Si bien Russell, gracias a la Primera Enmienda, tiene derecho a sus creencias, esta evidencia muestra que estas creencias cruzan la línea entre una ideología de odio y una ideología de odio que promueve la violencia”, afirmó la fiscal adjunta de los Estados Unidos, Josephine Thomas.
Sin embargo, no son los únicos crímenes que se relacionan con el grupo. El 22 de diciembre pasado, un joven de 17 años asesinó a los padres de su novia, Buckley Kuhn-Fricker y Scott Fricker. El joven intentó suicidarse después del crimen pero sobrevivió y se encuentra hospitalizado. La familia de las víctimas sospecha que el joven pertenecería al Atomwaffen Division.
La última víctima del grupo ha sido Blaze Bernstein, un joven estudiante gay y judío. Su cadáver fue encontrado a mediados de enero en Los Ángeles tras haber sido declarado desaparecido una semana atrás. El culpable fue su compañero de estudios Samuel Woodward, que también estaría vinculado al grupo neonazi.
