Está tranquilo en su casa u otro lugar y recibe una llamada en la que una persona con un acento particular le hace una oferta que asegura es imperdible. Y pese a que usted la rechaza una y otra vez, insisten.
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Seguro que esto le resulta conocido. Empresas que nos bombardean a través del correo o teléfono con publicidad de productos o servicios que no queremos. Pero ¿sabía que existe una herramienta llamada “No Molestar”? Es del Sernac y en ella usted puede pedir que no le sigan insistiendo.
De acuerdo a información solicitada vía Ley de Transparencia, desde agosto de 2013 hasta diciembre de 2017, más de 78 mil consumidores solicitaron a través de la web de dicho organismo que las empresas evitaran molestar con promociones ni por celular, teléfono fijo, mensajería de texto o correo postal, como indica la ley.
Según los registros de esa entidad, son las empresas de telecomunicaciones las que más solicitudes de este tipo han recibido. De hecho, de las diez primeras, siete son de este sector.
Respecto del número de personas que han presentado una solicitud, Felipe Bravo, profesor de derecho económico de la Universidad Católica, estima que “son pocas, considerando la masividad con que se envía publicidad o información no deseada a los consumidores”, añadiendo que esto refleja que “las personas acceden a la herramienta como última instancia”.
“Se cree que es una pérdida de tiempo y que de igual modo las empresas seguirán haciéndolo (enviar publicidad)”, sostiene Rojas
En tanto, Lya Rojas, abogada y socia directora de Rojas Abogados, explica que también puede deberse a la poca confianza sobre la efectividad de esta herramienta. “Se cree que es una pérdida de tiempo y que de igual modo las empresas seguirán haciéndolo”, sostiene.
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Por otro lado, el académico de la UC tampoco se sorprende de que sean las compañías de telecomunicaciones las más objetadas, “porque estamos frente a una industria altamente competitiva, donde la portabilidad numérica y la baja de precios hacen que exista mucha oferta”.
Aunque Bravo va más allá y apunta la relación entre empresas y usuarios. Considera que las áreas de servicios al cliente de éstas “no resuelven de manera eficiente los reclamos ante estas llamadas no deseadas”. A su juicio, esto se refleja en las quejas en general que informó el Sernac en enero, “donde la mayoría se concentra también en este sector”.
Empresas sancionadas
Si usted hizo la solicitud e igual lo siguen llamando o mandando correos, debe saber que las empresas, según la Ley de los Derechos de los Consumidores, pueden recibir multas de hasta 50 Unidades Tributarias Mensuales (UTM).
Según el reporte del Sernac, durante el periodo de funcionamiento de esta herramienta, solo tres empresas han sido denunciadas por este organismo y sancionadas por los tribunales. Se trata de Banco de Chile y Claro, con 10 UTM cada una, y Tarjetas Ripley con 5 UTM.
Respecto de que tan efectiva es la forma de denunciar y castigar estas malas prácticas, el abogado de la UC afirma que el mecanismo “es tremendamente positivo”, ya que “si el proveedor insiste en enviar publicidad no deseada, lo que ocurre generalmente, el Sernac puede hacer una denuncia para que se multe a dicha empresa”. Eso sí, cree que “quizás podría institucionalizarse el sistema” para que se “permita al Sernac poder accionar más fácilmente”.
En ese sentido, Rojas estima necesario “establecer sanciones específicas a este incumplimiento, estableciendo rangos de multas” y “dotar de mayores atribuciones” al organismo, “para evitar este engorroso trámite” de tener que pasar por los juzgados de policía local.
