La abogada y ex fiscal Marisa Navarrete, quien el martes asumió la defensa de los carabineros indagados por la presunta adulteración de evidencias en la “Operación Huracán”, descartó un conflicto de interés por su relación de pareja con el fiscal regional de O’Higgins, Emiliano Arias.
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«Uno defiende a personas, no defiende a instituciones. Yo no estoy defendiendo ni a Carabineros ni a la fiscalía, ni estoy atacando a la fiscalía», declaró anoche la abogada a radio Cooperativa.
«Estoy defendiendo a funcionarios de Carabineros. La convicción que tengo, de acuerdo a los antecedentes que he tenido, es que no han cometido ningún delito de los que se les están imputando«, añadió.
También dijo que ante la gravedad de las imputaciones, “ellos han considerado que la defensa que yo les podría hacer es absolutamente garantía de que lo que vamos a hacer será una defensa con la mejor arma que tenemos, que es la verdad«.
Navarrete confirmó que solicitará al fiscal nacional Jorge Abbott que cambie de la causa al fiscal regional de La Araucanía, Cristian Paredes, que investiga el presunto montaje, porque participó en la indagatoria de la “Operación Huracán”. Según señaló, Paredes es parte afectada y persecutor al mismo tiempo.
Junto con esto, pedirá que el Juzgado de Garantía de Temuco se declare incompetente para trasladar la causa a Santiago, dado que el presunto ilícito investigado se habría originado en la capital.
El martes, la abogada Navarrete asumió la defensa de los carabineros Patricio Marín Lazo, Marvin Marín Maluenda, Marcos Sanhueza Córdova, Héctor Olave Venegas, Manuel Riquelme Mardones, Leonardo Osses Sandoval y del ingeniero que creó el programa espía Antorcha 3.0, Álex Smith Leay, asesor civil de la Dipolcar de Temuco.
