Todos los ciudadanos holandeses mayores de 18 años se convertirán automáticamente en donantes de órganos, esto luego de que el Senado aprobara por 38 votos a favor y 36 en contra una polémica ley que se prevé que entrará en vigor el 1 de julio de 2020.
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La nueva legislación actúa de manera contraria a lo que generalmente se aplica, ya que desde un comienzo se considera a los ciudadanos como donantes, debiendo dejar constancia por escrito si se oponen a dicho estatus, de acuerdo con el diario español El País. La discusión se extendió principalmente en este punto bajo el argumento que puede resultar confuso para los holandeses.
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Ante dicha situación, se desarrolló un mecanismo que preguntará varias veces, a través de notificación oficial, si quieren ser donantes de órganos o no. De no haber respuesta se asumirá que el ciudadano “no se opone”, estatus que se explicitará en el carnet de donante.
En última instancia, la familia podrá oponerse al procedimiento demostrando que el fallecido que no respondió la notificación oficial no quería ser donante. Esto no podrá aplicarse a quienes ratificaron o se opusieron en vida a ser donantes, según el medio.
Debate
Desde la oposición, el Partido para la Libertad acusa que “el cuerpo de los holandeses no es propiedad del Estado, es suyo”, por lo tanto esta ley atentaría contra dicha libertad.
Sin embargo, los partidarios lo ven como una necesidad. “La Sanidad esperaba esta decisión, indispensable para los enfermos que aguardan una donación. Ahora necesitamos una buena campaña informativa, porque la gente puede cambiar de opinión y debe saber cómo se articulará la ley”, señaló Pia Dijkstra, la diputada de izquierda liberal que redactó el proyecto.
Holanda vive una época de escasez de donantes de órganos, las campañas de donación no han tenido éxito, tanto así que en 2015 murieron 132 personas esperando un transplante.