Estamos a días del inicio de los alegatos finales en la demanda marítima boliviana ante el tribunal de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) en La Haya y en Bolivia reina un aire triunfalista ante las declaraciones que dieron los ex presidentes en nuestro país.
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Frei, como vocero del grupo declaró que “no estamos dispuestos a aceptar, como en otras ocasiones, fallos con mucha creatividad, con mucha imaginación, pero que no respeten los acuerdos y los tratados”.
La postura de éstos, para lo que la prensa boliviana recoge, es no aceptar de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) “fallos creativos que no respeten tratados” en la demanda marítima, ha sido interpretado en Bolivia como el anuncio de una derrota anticipada y un desacato al fallo de ese tribunal.
Así lo asegura la presidenta de la Cámara de Diputados, Gabriela Montaño, quien dirigirá como presidenta interina el país por unas nueve horas porque están fuera del país el presidente Evo Morales, el vicepresidente Álvaro García y el presidente del Senado, José Alberto Gonzales.
De esta forma señaló que “estas declaraciones parecen un adelanto o una admisión de una derrota anticipada en La Haya. Si se rechaza un fallo de una corte internacional como esta, la máxima instancia de resolución de diferencias entre estados y países, se da la espalda al derecho internacional días y horas antes de que se inicien los alegatos orales”.
Por su parte, el diputado boliviano de oposición Gonzalo Barrientos también cuestionó la postura de los ex presidentes. «Es una declaración demagógica», afirmó.
«La susceptibilidad de Santiago está latente porque no le es ajeno un veredicto de ese tipo. En el litigio que lo confrontó con Perú, el mismo tribunal concedió a Lima una porción de su territorio marítimo con un, según los expertos, “fallo creativo”, añadió.
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Desde medios bolivianos destacaron también las declaraciones del actual senador y ex agente chileno, José Miguel Insulza, quien recalcó que «esto es solamente la campaña electoral de Evo Morales. Eso es lo que es. Si las cosas ya están como están (…) nadie va a suspender los alegatos del próximo lunes y el tema hoy está en La Haya».
Estas declaraciones surgieron en respuesta a que en un encuentro con medios internacionales, Morales recalcó «qué bueno sería que después del fallo haya algunos mediadores que hagan seguimiento», lo que generó un rechazo transversal en el mundo político chileno.
