Este martes se anunció que la nueva general de Orden y Seguridad de Carabineros sería la, hasta entonces, coronel Pamela Olivares Peña (48). La noticia fue bien recibida sobre todo porque por primera vez en la historia una mujer tiene la posibilidad de llegar al alto mando de la policía uniformada.
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Pero dentro de Carabineros las aguas estaban lejos de calmarse. Debido a que sólo lleva 29 años de servicio, antes que ella habría dos generación de coroneles con más antigüedad que en total suman 108. Todos ellos tienen que presentar su renuncia, por protocolo, hasta hoy jueves.
Obligación
El hecho se basa en un reglamento interno que tiene la institución y que obliga a las antigüedades que están por sobre la flamante general a poner a disposición sus cargos.
En este escenario, fue el mismo director de Carabineros, Hermes Soto, quien anunció que no se aceptarán todas estas renuncias. Aún así, para algunos, el hecho al menos es una señal de la más grande reestructuración de la historia-
Valoración
Para el diputado Leonardo Soto (PS), ex miembro de la comisión investigadora por el caso «Megafraude» de Carabineros, la designación de Olivares es positiva.
«Aunque no se vaya a concretar la renuncia de todos, probablemente se pueda remover a algún grupo específico de carabineros que no vayan a sintonizar muy bien con las reformas que va a tener que plantear el general Soto en la Institución» indica a Publimetro. Por eso, apunta, es una señal «hacia adentro».
La diputada Maite Orsini (RD), quien pidió una comisión investigadora por el caso de la «Operación Huracán», agrega que «toda renovación puede ser una oportunidad para la propia Institución, en especial si permite la inclusión de mujeres en su alto mando».
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Reforma histórica
Tanto para el diputado Soto como para su par Orsini, esta escenario puede ser el pie para comenzar con la reestructuración más grande de la historia de Carabineros, pero faltan cosas.
«La crisis tiene su origen en el descontrol y la cultura de impunidad en esa área, de redes de negocios, de corrupción que han ido desarrollándose por muchos años. Esa tarea es prioritaria y hay que enfrentarla con una nueva generación de coroneles y también de generales. Si se hace eso, sin duda estaremos ante la más grande reforma de Carabineros desde su fundación», sostiene el diputado Soto.
«Creo que es necesario pensar en cambios estructurales, más allá de la renovación de sus cargos» , agrega la diputada Orsini.
Aplauden nombramiento
Ya en el plano del nombramiento de una mujer en el alto mando, la diputada Orsini indica que «lo reconocemos como un avance histórico, pues abre la posibilidad tras 90 años de tener una mujer ocupando el máximo cargo de Carabineros. La equidad de género, de todas formas, debe ser un criterio rector en todos los rangos de la institución».
El diputado Soto, a su vez, afirma que «es una decisión que aplaudo, que es de mucha justicia, pues ella es la primera que tiene una posibilidad real de convertirse en directora general algún día».
