Albert Einstein expresó una frase, de esas que deben quedar para el bronce: «»locura es hacer la misma cosa una y otra vez esperando obtener diferentes resultados». Si esta premisa la ajustamos a lo que solemos hacer con desgano en la oficina, en nuestro sitio de trabajo, estamos frente a una situación que debe ser revertida a la brevedad.
El director de HumanNet Consultores, Andrés Cardemil, compartió los siguientes consejos para elevar la productividad laboral:
- Establezca un objetivo simple y alcanzable cada día (o noche). No se puede alcanzar un objetivo que aún no se ha establecido. Por ello, sin buscar grandes aspiraciones cotidianas, procure ser muy claro cada día respecto de lo que le gustaría alcanzar al finalizar el día, lo cual debe ser concreto y en lo posible “medible”.
- Planificar y organizar el día. Antes de comenzar el día, primero defina qué es lo que hará, y luego elabore rápida y mentalmente un plan tipo ranking que identifique lo más importante y lo menos importante del día que se avecina. Así podrá identificar las prioridades en un primer vistazo.
- Buscar el espacio y tiempo adecuado. Siempre es importante estar cómodo(a) y con el espacio acorde al trabajo que realizará. No resulta conveniente agendar otras actividades distintas a lo que tiene planificado hacer en ese espacio de tiempo y lugar.
- Empiece por lo más difícil. Primero procure sacar de su camino lo más pesado o complicado, es decir, las tareas más difíciles, para ir despejando la ruta. Luego, todo se facilitará mucho más, pues irá aumentando la velocidad. Es como poner las piedras grandes primero en el frasco, luego las más pequeñas, luego la arena y al final el agua.
- Evitar los distractores del teléfono y redes sociales. Para lograr enfocarse, debe evitar todas las distracciones que se generan a través de las redes sociales (Twitter, Instagram, Facebook, YouTube, etc.), ya sea desde su tablet, smartphone o PC, manteniendo en silencio ciertas Apps que no aporten al cumplimiento del objetivo buscado en lo inmediato.
- Clasifique y agrupe las tareas similares o que estén relacionadas. Para muchas personas es fácil y tentador querer realizar varias tareas a la vez. La idea es evitar al máximo la dispersión. Ya sea que esté escribiendo, calculando, leyendo, tomando notas, haciendo llamadas, respondiendo correos electrónicos o elaborando una propuesta comercial, la idea es que la actividad sea del mismo tipo. Se ha comprobado que, al agrupar las tareas, la tendencia es a hacerlas mejor y completarlas más rápido.
- Aumentar la velocidad: Fíjese metas específicas contra un tiempo definido. La idea es avanzar rápido, “hacerla corta” como diría un joven hoy. Puede ser de gran ayuda ponerse un cronómetro al frente, para cumplir metas autodefinidas en un tiempo determinado. Ej. Completar tres páginas en 1 hora, responder un e-mail en 20 minutos, realizar 5 llamadas en 40 minutos, etc. Con este método, se da un sentido de urgencia a las tareas, la concentración aumenta y se generan mejores resultados.
- Buscar ayuda o apoyo en personas o programas. Si se está sintiendo atascado en un tema, o avanza poco, procure responder la pregunta ¿qué programa o App puedo usar o a qué persona puedo acudir en busca de ayuda? No trate de ser autosuficiente en todo, recuerde que hay personas que conoce y son más expertas que usted en un tema. Y, además, hoy en día hay muchos programas que se inventaron para facilitarnos la vida.
- Una pausa para despejar: también debe recrearse. Una pausa saludable, o un pequeño recreo no es malo. Sobre todo, cuando ya avanzó bastante o completó una actividad definida, o cuando ya alcanzó un objetivo. Una buena idea es autodefinir compensaciones que a uno lo motiven a terminar una tarea. Ej. “Cuando termine esta carta y la envíe, iré por un café”; “Cuando termine la propuesta, veré el video que me enviaron por WhatsApp, antes no.”, etc.
- Alimentación sana, descanso suficiente y no al sedentarismo. Comer saludablemente y en horarios adecuados, fortalece las defensas y evita enfermarse. Practicar alguna actividad física o deporte, ayuda en la misma dirección. Yoga, pilates, bicicleta, running, natación, tenis, fútbol, o cualquier deporte colectivo, artes marciales, o incluso ir al gimnasio con una rutina definida, sin duda será mejor que estar sentado viendo TV. Del mismo modo, finalizado el día, acostarse en un horario que permita dormir 8 horas, hará que la persona tenga un descanso adecuado y reparador, todo lo cual contribuye a tu productividad para el día siguiente.