Países de Europa y América anunciaron de manera sistemática la expulsión de diplomáticos rusos. Más de 20 aliados occidentales ordenaron la expulsión de docenas de diplomáticos rusos en respuesta al ataque de agentes neurálgicos en el Reino Unido, en una muestra de solidaridad que representa el mayor golpe concertado a las redes de inteligencia rusas en el oeste desde la guerra fría.
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A esto se le añade la OTAN, quién decidió hoy expulsar a siete diplomáticos rusos y rechazar la acreditación a otros tres. El secretario general de la organización, Jens Stoltenberg ha dejado entrever que con este movimiento espera dificultar las actividades de espionaje que pueda realizar Rusia en suelo occidental: «Rusia verá reducida su capacidad para hacer trabajos de inteligencia en los países de la OTAN».
Otro país europeo se ha sumado este martes a los 14 que anunciaron ayer expulsiones de representantes rusos. Se trata de Irlanda , que expulsará a una persona. De esta forma, 16 de los 28 países de la UE han adoptado ya medidas de represalia hacia Rusia.
La expulsión coordinada, al fin y al cabo un gesto de solidaridad y un aviso a Moscú de que no puede saltarse las reglas, representa una contundente victoria diplomática británica.
Respuesta de Moscú
Moscú por su parte, está preparando una “dura respuesta” al anuncio de Estados Unidos de que expulsará a 60 diplomáticos rusos, dijo un alto cargo del gobierno ruso.
Moscú está decepcionado por el anuncio de Washington de la expulsión de 60 diplomáticos rusos del país y el cierre del consulado en Seattle, dijo el viceministro de Exteriores, Sergei Ryabkov, a la agencia de noticias RIA Novosti el martes.
La decisión de Estados Unidos “se encontrará con una contundente respuesta”, dijo Ryabkov, que no ofreció más detalles.
