El pasado miércoles cuando calló la noche en la provincia de Carabobo también cayeron las llamas en una comisaría que mantenía irregularmente a una cantidad sobre poblada de reos.
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El saldo de la tragedia fueron 68 personas fallecidas, de las que 66 correspondían a privados de libertad y dos a parejas de los reclusos que los visitaban. Las opiniones están totalmente cruzadas y mientras algunos defienden la tesis de que los propios presos prendieron fuego al lugar para realizar un motín. Por otro lado, familiares y testigos dicen que fueron los policías del gobierno de Maduro quienes rociaron bencina para encender la comisaría.
Maduro pide investigar
Ayer el mandatario bolivariano, Nicolás Maduro, anunció que se iniciará una investigación contra cinco policías que ya permanecen detenidos. Así busca esclarecer los confusos hechos que caen en un contexto de crisis política y total hacinamiento de las cárceles.
Hoy es Humberto Prado, coordinador del Observatorio Nacional de Prisiones, quien pidió «descartar dudas» y volver a realizar las autopsias de los cuerpos, que sus familiares no tuvieron oportunidad de ver.
El conversaciones con el medio El Nacional, Prado también denunció que las celdas quemadas tenían capacidad sólo para treinta personas, y en su interior se encontraban 180 presos, es decir, un 600% de hacinamiento.
