Durante la noche del lunes se viralizó un impactante video que muestra a un francotirador del Ejército israelí disparando a un manifestante palestino, mientras se escuchan gritos de celebración de varios soldados por acertar el tiro, todo en la frontera de Israel con la Franja de Gaza.
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En el registro, grabado desde una especie de telescopio, se puede ver cómo avanza un manifestante palestino a la reja fronteriza, a la vez que se escucha la voz del comandante israelí dando órdenes al francotirador.
“Tan pronto como se detenga, le derribas. ¿Tienes una bala en la recámara? ¿Le tienes a tiro?”, señala el comandante. El soldado responde afirmativo y el superior da la orden de disparo, pero la cancela inmediatamente debido a la presencia de un niño en la zona. Cuando se despeja el comandante da la orden y el soldado dispara.
Posteriormente se ve cómo el palestino se desploma en el suelo mientras los soldados tras la cámara celebran.“Le ha dado en la cabeza”, comenta uno con admiración mientras otro responde: “Sí… hijo de puta… Guau”.
“Es un video legendario, hijo de puta”, señala otro soldado. “¿Lo has grabado?”, pregunta un cuarto hombre, a la vez que manifestantes acuden donde se encuentra el palestino en el suelo para darle ayuda médica.
Críticas
El registro fue difundido en todos los canales de la televisión hebrea en medio de críticas, debido a que por normas del Ejército israelí sólo se puede disparar contra manifestantes armados, que amenacen la vida de los soldados, que quieran sobrepasar la valla o sabotear la misma; situaciones que en este caso no se cumplen.
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Por el momento se desconoce la fecha exacta en que fue grabado el registro, sin embargo, las Fuerzas Armadas de Israel ya anunciaron una investigación al respecto.
Desde la ONG Breaking the Silence, creada por ex militares detractores de la ocupación de Palestina, señalan que al margen del tiempo en que haya sido grabado el video «todos los que hemos servido en los territorios palestinos sabemos que más de 50 años de ocupación han conducido a una corrupción moral, hasta el punto de disparar a civiles desarmados”, según recoge El País.